“Me han definido el Pilar (institución privada madrileña) como el colegio donde se encontraban los que se tenían que encontrar”, comentaba Jordi Évole en un capítulo de Salvados (Colegio El Pilar). Esta frase podría resumir el objetivo principal de las escuelas y universidad privadas, que no es otro que el de perpetuar el poder de forma elitista en manos de la burguesía.
Las élites burguesas, a tenor de lo que dicen grandes gurús económicos y pensadores del capital, no lo son tanto meritocracia y por conllevar un gran esfuerzo, sino que se acaban forjando entre familias con un buen nivel adquisitivo, grandes herencias y poseyendo una lista casi indefinida de contactos que los conozcan y les coloquen en los mejores puestos de trabajo en la sociedad capitalista. Claro que, para alcanzar este nivel, necesitas de entramados para llegar a las cimas del poder, y una de las formas más eficientes es a través de la educación.
La educación es uno de los pilares en los que se libra una gran batalla ideológica, ya que tiene una influencia muy importante la Iglesia Católica y empresas privadas que nutren de sus pensamientos conservadores y neoliberales a la juventud. En este caso es la educación concertada y la privada, ambas religiosas, quiénes sacan grandes beneficios de las leyes que se aprobaron en el Boletín Oficial en el franquismo.
Entendiendo este contexto, comprenderemos porqué Jose Luis Mendoza (empresario cartagenero y perteneciente al movimiento ultracatólico, Camino Neocatecumenal, conocido popularmente por los Kikos) creó en noviembre de 1996 a través de la Fundación Universitaria San Antonio, la UCAM (Universidad Católica San Antonio de Murcia). Dicha universidad empezó a contar con carreras profesionales de ciencias de la salud, ciencias sociales y jurídicas, arquitectura, de artes y humanidades e incluso algunas relacionadas con el ámbito religioso. Dado fue el crecimiento de esta universidad, que se expandió por Cartagena, Málaga (de forma reciente) y con atisbos de llegar a otras zonas del país como Madrid.
Para tener tal crecimiento en poco más de dos décadas de existencia, la UCAM ha primado dos valores: el religioso y el deportivo. Por una parte, su adoctrinamiento católico con misas, asignaturas de teología y ética enfocada a la religión en todas las carreras (hasta tercer curso), crucifijos en sus clases y unos profesores que se ajustan a los parámetros de la universidad, o al menos no los contradicen (sino no serían contratados). También hay que sumar la importancia de la propaganda (a través de medios de comunicación propios y de publicidad en otros) del deporte a niveles casi inimaginables, en la que muchos deportistas son becados y dando imagen de ‘Universidad del deporte’. A cambio, estos deportistas obtienen privilegios, ya que no suelen asistir de forma presencial, la universidad se ajusta a su nivel económico, se les facilita las asignaturas, etc.
Estos acuerdos les son favorables a las dos partes: la universidad gana en promoción y los deportistas obtienen una carrera o una formación, acompañada de una suma de contactos (preferentemente deportivos, aunque también políticos y económicos) que les hace tener la vida ya solucionada cuando terminan sus respectivas carreras deportivas. Así es como se va conformando la élite. Además, la universidad cuenta con un equipo de baloncesto en primera división, otro de fútbol en segunda división b, un equipo de voleibol y personalidades como la nadadora Mireia Belmonte, el taekwondista Joel González o el piragüista David Cal, con lo que hacen atractiva el “formar parte de esta familia”.
Pero para llegar a alcanzar este estatus, la UCAM de Jose Luis Mendoza se valió de acuerdos con la Iglesia Católica, concretamente con los que firmó el gobierno español con el Vaticano en 1979, para poder crear esta empresa educativa y tener un mayor poder e influencia en la sociedad murciana.
Las ideas ultracatólicas y ultraconservadoras de Jose Luis Mendoza hizo que apoyara al Partido Popular en la Región de Murcia, siendo este un matrimonio de conveniencia, la UCAM recibe tratos de favor, recalificaciones, permisos, concesiones de todo tipo, y el PP cuida a esta parte de su electorado. De hecho, este partido y sus personalidades eran bienvenidas a esta universidad dando conferencias, teniendo un puesto como profesor en varios másteres que oferta la universidad o premiándolos con el título de Doctor Honoris Causa a integrantes del partido o a cercanos ideológicos/religiosos.
Jose María Aznar (2010), Jaime Mayor Oreja (2012) fueron algunos con pasado del partido popular que tuvieron su Doctor Honoris Causa. Este título honorífico también lo adquirieron los cardenales Antonio Cañizares (2010) y Antonio María Rouco Varela (2016) o el ex seleccionador de España, Vicente del Bosque (2013). Quedando en evidencia el marcado carácter político y religioso a la hora de entregar estos títulos, destaca también que de las 23 personas que han obtenido este premio solo haya una mujer, la bioquímica María Teresa Miras.
La universidad aprovechaba “su amistad” con políticos del PP para ofrecerles conferencias como la que dio el ex ministro de Interior, Jorge Fernández Díaz en mayo de 2017, titulada ‘El misterio de Fátima’. Este ministro ya había pasado por la universidad dos años antes para facilitar acuerdos con la Guardia Civil, en concreto con la Fundación Guardia Civil, con el que se acordaba una formación para los agentes. Cabe recordar que, en 2013, Jose Luis Mendoza fue distinguido con la Cruz de Plata al Mérito, premio más importante que otorga la Guardia Civil a personas no militares.
Otros políticos de este partido que han aprovechado la simbiosis existente entre la universidad católica y el PP han sido Teodoro García Egea, actual secretario general del Partido Popular y el jefe del gabinete, Pablo Cano. Ambos políticos dieron clase en la universidad. El primero, de hecho, es profesor asociado, y el segundo, era director de la Oficina de Proyectos Internacionales, además de estar licenciado por la UCAM y habiendo cursado dos másteres, siendo también concejal del ayuntamiento murciano.
Decía en párrafos anteriores que el PP era bienvenido (en tiempos pasados) en la universidad. Con la no recalificación de algunos terrenos (por parte del PP) que hubieran favorecido a la universidad y la llegada de VOX a la ciudad de Murcia y a la propia Región, la UCAM se ha ido acercado cada vez más a este partido por su discurso aún más reaccionario, más afín a las ideas de Mendoza, dejándose querer este último. Algunos casos son notorios como Jose Ángel Antelo, ex capitán del UCAM Murcia CB y responsable del departamento de Marketing deportivo de la universidad, que desde diciembre de 2019 ocupa el cargo de presidente provincial de VOX, además de Jose Manuel Marín, senador del partido y que es profesor en la universidad o el alcalde de Guadalupe, pedanía murciana, que además es trabajador de la universidad, según informa eldiario.es
La importancia de las amistades a Jose Luis Mendoza le han abierto las puertas de negocio para su universidad y para otros frentes, claro que no son amistades cualesquiera: el ex presidente del gobierno, Jose María Aznar; el presidente del Comité Olímpico, Alejandro Blanco; el ex ministro de Interior, Jorge Fernández Díaz; el periodista radiofónico, Jose María García, el vicepresidente del Parlamento Europeo y ex presidente de la Región de Murcia, Ramón Luis Valcárcel; el ex presidente de la Conferencia Episcopal, Antonio María Rouco Varela; el fundador del movimiento ultra católico del Camino Neocatecumenal, Kiko Argüello y algunas personalidades más.
Además, Jose Luis Mendoza cuida bastante bien a la Iglesia, ya que anualmente suele mandar un cheque con miles de euros, en algunos casos han llegado a ser de algunos millones de euros como atestigua el diario El País. De hecho, el cartagenero solía ir personalmente hasta la ciudad del Vaticano para entregar dichos cheques a Juan Pablo II, a Joseph Ratzinger o a Jose María Bergoglio. Las cantidades aproximadas que ha dado el presidente de la UCAM a la Iglesia se estiman en 49 millones de euros en 15 años. De este dineral dado a la Iglesia, sus amistades con políticos del PP y VOX, alianzas que tiene la universidad con empresas privadas y acercamientos a la Guardia Civil y grupos militares, se entiende el poder que tiene Jose Luis Mendoza y la UCAM en Murcia y otros lugares, pero, sobre todo, se comprende la expansión de este modelo universitario elitista del que solo unos pocos se aprovechan, y que es necesario denunciar y combatir por su esencia antidemocrática y elitista, que perpetúa la reproducción de los valores e ideas más reaccionarias del sistema capitalista.
Jose Izquierdo
Foto de la UCAM : https://www.ucam.edu/noticias/la-ucam-abre-el-curso-con-el-encargo-del-papa-de-la-difusion-mundial-de-las-ciencias-del