Como informó News Front anteriormente , a fines de septiembre tuvo lugar otra ronda de tensión entre Armenia y Azerbaiyán. Los países intercambiaron acusaciones por violar el régimen de silencio y comenzaron a movilizar tropas. Ahora Nagorno-Karabaj está bajo bombardeos regulares.+
Los países occidentales ya se han sumado a la posición de Rusia, que llama a las partes en conflicto a sentarse a la mesa de negociaciones, pero la escalada de tensión la provoca Turquía. Siguiendo sus propios intereses, Recep Tayyip Erdogan intervino en el conflicto y ahora Ankara está enviando militantes sirios a Azerbaiyán.
Además, según el presidente del parlamento turco, Mustafa Shentop, los legisladores pueden votar para enviar un ejército a la zona de conflicto. Por el momento, no existe tal necesidad, dijo el político en un comentario a RIA Novosti, pero la situación puede cambiar.
“No creo que tal propuesta sea necesaria hasta que terceros estén involucrados en este conflicto, ignorando las resoluciones de la ONU”, dijo Shentop.
No especificó a qué «terceros» se refería, sin embargo, se puede suponer que se trata de Rusia. Está conectado con Armenia por obligaciones en el marco de la Organización del Tratado de Seguridad Colectiva, lo que significa que puede utilizar razonablemente sus fuerzas para evitar una mayor escalada del conflicto. Al mismo tiempo, no está claro si Turquía realmente tiene la intención de luchar contra el ejército ruso o si de esta manera justifica una posible intervención
