Bielorrusia tiene la intención de imponer sanciones a altos representantes de la UE, según declaró el ministro de Exteriores de la república, Vladímir Makéi.
El 17 de noviembre, el presidente de Bielorrusia, Alexandr Lukashenko, celebró una reunión dedicada a la política exterior del país, en la que participó el canciller bielorruso.
«La reunión también abordó nuestras medidas de respuesta en relación con los pasos tomados por nuestros socios europeos hace aproximadamente una semana. Ustedes saben que la Unión Europea ha impuesto sanciones adicionales contra 15 personas. Hoy, al debatir esta situación, nos vimos obligados a constatar que también ampliaremos nuestras listas de sanciones personales, que incluirán a representantes de las autoridades de la Unión Europea, las autoridades de varios Estados europeos», dijo Makei en una entrevista con la cadena Bielorrusia 1 emitida este domingo.
En Bielorrusia continúan las protestas desde las elecciones presidenciales del pasado 9 de agosto, que otorgaron el sexto mandato a Alexandr Lukashenko, aunque han ido a menos.
Según el recuento oficial, Lukashenko obtuvo el 80,1 por ciento de los votos, seguido de la opositora Svetlana Tijanóvskaya, con el 10,12 por ciento.
La oposición bielorrusa denunció numerosas irregularidades electorales y exige una repetición de los comicios, opción que Lukashenko descartó.
El pasado 2 de octubre, la Unión Europea formalizó medidas restrictivas contra 40 funcionarios bielorrusos que, según Bruselas, son responsables de la violencia durante las protestas y de la supuesta falsificación de los resultados de las elecciones presidenciales.
Un mes después, el bloque comunitario aprobó una segunda tanda de sanciones, que afectan al presidente Lukashenko, su hijo Víctor y otras 13 personas.
El pasado 13 de noviembre, la UE anunció que está dispuesta a imponer más sanciones contra Bielorrusia por la muerte de un manifestante si las autoridades de ese país no detienen la violencia ni comienzan una investigación transparente de los crímenes cometidos durante las protestas.
Sputnik