La Amazonía de Brasil perdió 8.426 kilómetros cuadrados (km2) de selva en 2020, según el Instituto Nacional de Investigaciones Espaciales (INPE, por sus siglas en portugués).
Solo en diciembre pasado fueron destruidos 216 km2 de selva en la Amazonía. El área es un 14 % mayor que la verificada en el mismo mes de 2019, detalla el INPE.
Esta es «la segunda peor marca anual», registrada por el Sistema de Detección de Deforestación de la Amazonía Legal en Tiempo Real (DETER), que inició en 2015, dice el Observatorio del Clima, que analiza los datos del INPE.
La anterior marca fue justo el año previo, en 2019, cuando se devastaron 9.178 km2 de selva en la Amazonía brasileña.
«Los dos años de gobierno de (Jair) Bolsonaro consolidan el peor escenario de alertas detectadas por el sistema (DETER) en la región amazónica. La media de los tres años previos a su inauguración (2016 a 2018) fue de 4.845 km2. En los 24 meses de la administración de Bolsonaro, el promedio anual fue de 8.802 km2, un aumento de más del 81 %», dice el Observatorio del Clima, al hacer un análisis de los datos.
Marcio Astrini, secretario ejecutivo del Observatorio del Clima, señaló que no es una coincidencia que los dos años de gobierno de Bolsonaro coincidan con los más destructivos en la Amazonía, puesto que considera que es «el resultado de las políticas de destrucción ambiental implementadas» por su Administración.