Se trata del batallón de la 117.ª Brigada de Infantería que, según informaron el sábado por la noche (hora local) medios locales, ha entregado todo su equipo militar a las fuerzas yemeníes.
El reporte agrega que esta es la segunda rendición de un batallón de esta brigada, y que tal hecho provocó ira y resentimiento entre las tribus, pues, en respuesta, se batieron en retirada de algunas de sus bases.
“Estos hechos han allanado el terreno para el avance del Ejército yemení y los comités populares”, afirman diversos informes.
Esta rendición se ha producido en momentos en que las fuerzas yemeníes, que cuentan con el apoyo del movimiento popular Ansarolá, han conseguido destacados avances ante los mercenarios saudíes en Marib, región ubicada en el centro-oeste de Yemen.
El grupo terrorista Daesh ha confirmado abiertamente que sus miembros están luchando junto a grupos de mercenarios en dicha región, rica en hidrocarburos, que se considera el último bastión de las fuerzas respaldadas por Arabia Saudí en el norte de Yemen.
En los últimos meses, las tropas yemeníes han progresado con éxito en el frente de batalla contra Arabia Saudí y sus aliados, liberando diferentes localidades y pueblos ocupados por los mercenarios de la monarquía árabe en los alrededores de Marib.
La liberación de la estratégica Presa de Marib, en las proximidades de la ciudad homónima, es parte de los recientes logros cosechados por los combatientes de Ansarolá.
Las fuerzas yemeníes han logrado hacerse también con el control de la localidad de Al-Talha al-Hamra, en el oeste de Marib, así como de la base militar de Kofal, perteneciente a las fuerzas de la coalición saudí y localizada en el distrito de Sirwah.
Ante las victorias del Ejército yemení, el reino árabe y sus socios recurren a medidas inhumanas para frenar sus éxitos. El jueves, el Consejo Supremo yemení para Asuntos Humanitarios pidió a la comunidad internacional el fin de los crímenes de Arabia Saudí y los Emiratos Árabes Unidos (EAU), que utilizan a los civiles en Marib como escudos humanos para detener el avance de las fuerzas del país árabe.