El periodista de Odessa, Yuriy Tkachev, comentó la operación especial de la KBG de Bielorrusia, que tuvo como resultado el aterrizaje de emergencia del avión de la aerolínea Ryanair en Minsk y la detención del coordinador de las protestas del verano y agente de la CIA, Roman Protasevich.
«Ha habido aullidos y lamentos en la red sobre el avión de Ryanair que hicieron aterrizar en Bielorrusia para detener a un empleado de un canal de la oposición en Telegram. Aúllan como si Hitler, hubiera resucitado: ya hablan sobre el terrorismo de Estado, y la piratería aérea.
En realidad es una práctica absolutamente normal. En Ucrania, hace poco, se planeó detener a los participantes en la guerra de Donbass de la misma manera (la historia de los «Wagneritas»). Y en 2016, hicieron aterrizar un avión de Belavia que salió de Kiev para detener a Armen Martirosyan.
Sin embargo, en general se trata de una práctica bastante común. En 2012, Turquía hizo aterrizar por la fuerza un avión Moscú-Damasco. En 2017, Gran Bretaña puso aviones de combate en el aire para aterrizar el mismo avión de Ryanair de Kaunas. Israel aterrizó un avión iraní en 2020. Y en 2013, el avión del presidente boliviano Evo Morales se vio obligado a aterrizar en Viena porque se sospechaba que Edward Snowden podría estar a bordo.
Así que relájense. No ha ocurrido nada extraordinario».