Este sábado, el secretario ejecutivo de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América-Tratado de Comercio de los Pueblos (ALBA-TCP), Sacha Llorenti, ha condenado las nuevas sanciones de Estados Unidos contra Cuba, tachando las listas espurias de EE.UU. de “ilegítimas”.
“Cuba es sinónimo de dignidad, resistencia y solidaridad”, ha destacado el titular del bloque, en un mensaje publicado en Twitter, para luego denunciar que el país norteamericano “es sinónimo de atropellos, invasiones y saqueo”.
En este sentido, el vocero del Ministerio chino de Asuntos Exteriores, Zhao Lijian, criticó el viernes, en una entrevista concedida a la agencia de noticias cubana Prensa Latina, que la Casa Blanca ignora el clamor mundial y mantiene intacto su bloqueo económico, comercial y financiero al país latinoamericano.
Además, el canciller cubano, Bruno Rodríguez, expresó la misma jornada su rechazo enérgico, remarcando que “estas medidas arbitrarias se suman a la desinformación y agresión para justificar bloqueo inhumano contra Cuba”, que ejerce permanentemente el Gobierno norteamericano desde hace seis décadas, y que ha recrudecido en medio de la pandemia del nuevo coronavirus, causante de la COVID-19.
Estas palabras se produjeron después de que, la Administración de EE.UU., presidida por Joe Biden, impuso el mismo viernes sanciones a la Policía Nacional Revolucionaria (PNR) de la isla, agregando a su lista negra el coronel Oscar Callejas Valcárcel, primer segundo jefe de la Dirección General de la PNR, y el coronel Eddy Sierra Arias, segundo jefe de la Dirección General de la propia institución.
Tales nuevas medidas contra la Habana responden a la presunta responsabilidad de los sancionados en la represión de las protestas del pasado 11 de julio en la mayor parte de Cuba y que siguieron unos días después, tal como dijo el Departamento del Tesoro de Estados Unidos.
Washington sigue su política hostil contra la Habana, mientras que su mandatario durante su campaña electoral prometió que eliminaría las medidas coercitivas impuestas por su predecesor, Donald Trump, a la isla; sin embargo, lleva desde el pasado 20 de enero en la Casa Blanca y siguen en vigor las 243 sanciones, entre ellas 55 impuestas en el contexto de la COVID-19, por el presidente republicano.