Nuevo Rumbo.— Los militantes del PCTE estamos inmersos en una tarea fundamental para los comunistas en España, el debate del Manifiesto Programa del Partido Comunista que será aprobado en nuestro Congreso del Centenario. Un reto que se suma a nuestra tarea de recuperación del hilo rojo de nuestra historia.
Una de las partes más importantes de dicho Manifiesto Programa es formular cómo vamos a llegar a la revolución socialista. Algo que muchas veces se ignora, pasando del análisis de la situación actual a lo que se propone en contra, pero sin explicar cómo lograrlo, qué camino nos toca recorrer.
Durante dos capítulos abordamos ese camino que nos toca recorrer a los comunistas y a toda la clase obrera, comenzando por explicar por qué el socialismo- comunismo supone una superación histórica a todos los sistemas productivos anteriores y cómo el imperialismo, fase superior del capitalismo, es la ante sala de la revolución socialista. A lo largo de esa explicación, confrontamos la concepción etapista de la construcción del socialismo-comunismo, aquellas teorías que dicen que es necesaria una revolución democrática en España, antes que la revolución socialista, o que es necesaria una república federal capitalista, previa a la república socialista. Nosotros afirmamos, en base al materialismo histórico, que la única revolución pendiente que queda en España es la socialista.
Una vez aclarada el carácter de la revolución, describimos el camino que queremos construir hacia la revolución socialista, para lo que es esencial definir qué clase es la vanguardia, quién dirige ese camino y cómo se realizan las alianzas sociales. Nosotros tenemos claro que es la clase obrera la que debe dirigir ese camino revolucionario y que caben las alianzas con otras capas sociales, pero sin ceder la dirección y aislando las posiciones vacilantes que acaban apoyando a la burguesía, la clase a derrotar.
También abordamos las tareas del PCTE en ese camino, que no son otras que ser el Partido de Nuevo Tipo necesario para organizar y dirigir el camino revolucionario, y favorecer las condiciones subjetivas para el éxito de la revolución socialista. Hacemos un llamamiento a unirse al PCTE a todos los y las comunistas, que, a pesar de experiencias negativas, sigan compartiendo la necesidad de recorrer este camino hacia la revolución socialista.
Por último, tratamos la necesidad de crear nuevas estructuras de poder, que se enfrenten a la represión y que no cedan ningún terreno al dominio ideológico capitalista y a la reacción que aumenta día a día.
Los debates que tengamos nos permitirán salir con más fuerza y capacidad para organizar la revolución socialista, y comenzar a andar ese camino definido y tan necesario.
Redacción de Nuevo Rumbo