El 6 de agosto es uno los días más tristes que recoge la historia de la humanidad. En 1945 las 8:15 horas desde un avión estadounidense fue lanzada sobre la ciudad japonesa de Hiroshima la primera bomba atómica usada directamente sobre población civil, causando la muerte a más de 70 mil personas.
Tres días después, el 9 de agosto a las 11:02 am, el gobierno de Estados Unidos repitió el crimen de lesa humanidad, esta vez 55 mil de los habitantes de Nagasaki perdieron la vida, luego de que fuera detonada la segunda bomba atómica. En ambas ciudades, la gran mayoría de las muertes fueron de civiles.
Las razones que llevaron a los Estados Unidos a lanzar las bombas atómicas sobre Hiroshima y Nagasaki aún son objeto de debate, pero las consecuencias son evidentes hasta hoy.
Es difícil saber con certeza cuántas víctimas causaron, pero se calcula que acabaron con la vida de más de 200 mil personas. Además, arrasaron por completo ambas ciudades.
Hoy, cuando se cumplen 76 años de tan horrendo crimen, las campanas vuelven a sonar en Hiroshima en recordación a las victimas porque como dijera el líder Histórico de la Revolución Cubana, Fidel Castro: » Nuestro deber -y es la mejor forma de apoyar el esfuerzo de las víctimas de aquel bárbaro y brutal ataque contra Hiroshima y Nagasaki- es divulgar todo esto”.