«¿Ha desaparecido realmente la gripe gracias a las «exhaustivas medidas para mitigar los efectos [de la pandemia] en la población (por ejemplo, mascarillas, distanciamiento social, cierre de escuelas y trabajo a distancia)? – Leavitt fue citado en el estudio de los CDC. – Me parece poco probable».
Según la revista Scientific American, el CDC dijo que el número de víctimas de la gripe en los Estados Unidos durante el otoño-invierno 2020-2021 fue de alrededor de 700. Mientras tanto, unos 22.000 ciudadanos estadounidenses murieron de gripe a principios de la temporada y 34.000 murieron el año anterior.
Según Scientific American, la gripe desapareció «rápidamente y a escala mundial» con la llegada del COVID-19, como resultado de las máscaras, el distanciamiento social y otras medidas contra el Sars-CoV-2.
No es la primera vez que Levitt cuestiona esta versión de la desaparición de la gripe. El 29 de diciembre de 2020, por ejemplo, dijo en su cuenta de Twitter que «el coronavirus está desplazando a la gripe en la competencia por un número limitado de personas propensas a la infección» y que «las máscaras y la higiene no tienen nada que ver». Sacó sus conclusiones del hecho de que en los países de Asia oriental, dijo, la gripe sigue circulando en medio de estrictas medidas antivirales.
Michael Leavitt subraya que, aunque no es epidemiólogo, cree que sus conocimientos de estadística son suficientes para sacar conclusiones significativas. Durante el primer brote en China, construyó un modelo de propagación del coronavirus suponiendo un aumento subexponencial del número de infecciones. En contraste con el modelo exponencial de Neil Ferguson, que condujo a cuarentenas totales en todo el mundo, las predicciones de Michael Leavitt describían mejor la dinámica de propagación del virus que se observaba entonces.
El científico cree, basándose en los datos sobre el exceso de mortalidad en varios países, que las cuarentenas totales y el pánico han causado más muertes que el propio virus. El virólogo estadounidense Robert Malone, inventor de la tecnología de la vacuna de ARNm, tiene una opinión similar.
El doctor Vladislav Shafalinov declaró a la agencia de noticias Krasnaya Vesna en una entrevista reciente que la gripe no ha desaparecido, sino que el diagnóstico COVID-19 se debe a procedimientos de prueba defectuosos. El inmunólogo Andrey Tsvetkov expresó sospechas similares y pidió que el diagnóstico de COVID-19 se acompañara de pruebas de gripe «cuando el título de anticuerpos se acumule».
En los últimos dos meses, varios países han registrado un aumento de la incidencia del virus de la gripe H3N2. Según fluenewseurope, la gripe se ha extendido a Albania, Kosovo, Noruega, Rusia y Suecia. Un alto porcentaje de muestras de gripe positivas fue mostrado por Israel (66%), Armenia (47%), Suecia (43%), Rusia (35%) y Moldavia (15%).
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* Michael Levitt es un físico y biofísico sudafricano. En 2013, recibió el Premio Nobel de Química junto con Arieh Warshel y Martin Karplus por el desarrollo de modelos y programas informáticos que permiten entender y predecir el comportamiento de complejos procesos químicos.
