Aviones no tripulados de Ankara dispararon misiles contra varios sitios de las FDS, aliadas de Washington, en las zonas rurales del municipio de Derbasieh en el norte de Hasakeh en la frontera turca, lo que obligó a esta milicia a evacuar sus posiciones por temor a más bajas, informaron activistas citados por el diario al-Watan.
Otras acciones hostiles tuvieron logar en las inmediaciones de los poblados Karbashk, Aliyah y Jatal, y ello provocó la huida de familias hacia zonas cercanas, indicaron las fuentes.
Asimismo, los militares turcos y el llamado Ejército Nacional, patrocinador por el gobierno de Ankara, bombardearon los poblados de al-Boubi, Dadah, Tal Diab, Asadiya, al-Kasra e Ibrahimiya en el municipio de Abu Rasin.
Las referidas localidades son blancos desde hacer más de tres meses de intensos ataques que ocasionaron el desplazamiento de la mayoría de sus residentes.
En el mismo contexto, un dron de las fuerzas de Ankara atacó con misiles dirigidos sedes de las FDS en la localidad de Ain Arab al norte de Alepo, mientras la ciudad de Ain Isaa al norte de Raqa, fue nuevamente bombardeada con artillería pesada.
Turquía controla desde 2018 zonas en el norte de Siria, particularmente en las provincias de Idlib, Alepo, Raqa y Hasakeh, donde apoya públicamente la llamada agrupación “Ejército Nacional” y otras organizaciones calificadas de terroristas por Damasco.
En estas zonas, continuos choques se producen entre las FDS y los militares turcos y sus grupos, lo cual causa bajas civiles y pérdidas materiales.
El gobierno sirio denunció en varias ocasiones esa presencia, la calificó de ocupación y aseguró que impide la liberación completa de su territorio del terrorismo.