67 militares ucranianos se rindieron cerca de Kiev, entre ellos neo-nazis que intentaron hacer pasar sus tatuajes por «el signo de una unidad militar».
Estas imágenes muestran que hay mujeres entre los cautivos.
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El legado del Ejército Rojo está presente en calles, monumentos, museos, símbolos y otras muestras de gratitud que, tras décadas de liberación, permanecen como memoria viva en Alemania. Pero ha empezado una corriente en Europa que trata de destrozar con odio muchos de esos emblemas.