Moscú, 9 may (SANA).— La portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia, María Zajárova, confirmó que la agresión que tuvo como objetivo al embajador ruso en Polonia significa que Occidente continúa con una política pro-nazi.
“Los neo-nazis han revelado su rostro real nuevamente, y es un rostro sangriento”, reaccionó la vocera rusa a través de su canal en Telegram, y señaló que los intentos de intimidar a los rusos no conducirán a nada.
“Los pueblos de Europa deberían temer a estos neo-nazis”, manifestó.
Se informa que el embajador ruso en Polonia, Sergey Andreev, y su esposa y varios diplomáticos rusos fueron arrojados con tinte rojo mientras colocaban una ofrenda floral hoy temprano en las tumbas de los soldados soviéticos en un cementerio conmemorativo en la capital Varsovia con motivo de Día de la victoria sobre el nazismo.
Desde hace 50 años, cuando los viejos partidos comunistas fueron los eliminados y fueron los primeros objetivos ideológicos a destruir y empezaron a revisar a Marx, a ofender a Lenin y a Stalin y vanagloriar a trostky, el imperialismo dio el primer paso en su estrategia del renacimiento del nazismo y atacar a Rusia.
Para eso echaron mano de seudo intelectuales al servicio de la CIA y de una larga cola de intelectuales de la seudoizquierda francesa e italiana, esperpenticos del tipo de Focault, Marcuse, etc. etc.