En una rueda de prensa ordinaria, aseguró que el gobierno alemán, el equipo de crisis del gas y los operadores de la red siguen de cerca la evolución de los acontecimientos para tomar medidas en caso de que fuera necesario.
Según el informe diario de la Agencia Federal de Redes, «el suministro de gas en Alemania es estable» y «la seguridad del abastecimiento sigue estando garantizada», refirió la funcionaria.
El documento, que estudia los posibles efectos de la reducción de los tránsitos de gas por Ucrania para Alemania y Europa, precisó que los volúmenes que llegan a Alemania a través de región ucraniana bajaron más de un 25 por ciento respecto a ayer como consecuencia de la reducción de los tránsitos.
Sin embargo, estos volúmenes son compensados por el aumento de flujos principalmente de Noruega y Holanda y los niveles de llenado de los depósitos alemanes de almacenamiento de gas «aumentan constantemente».
Actualmente son notablemente más elevados que en la primavera de 2015, 2017, 2018 y 2021 y se sitúan en el 38,6 por ciento, precisó Einhorn.
Destacó que la mayor parte del gas que llega a Alemania procedente de Rusia lo hace a través del gasoducto Nord Stream, pero rechazó que el país pudiera recurrir al gasoducto Nord Stream 2, cuya certificación fue bloqueada por Berlín como respuesta al conflicto ruso ucraniano.
