El Reino Unido está comprando “viejas” armas de fabricación soviética, además de equipo militar ruso en todo el mundo, para suministrarlas a las Fuerzas Armadas de Ucrania, declaró el ministro de Defensa británico, Ben Wallace, citado por el diario The Wall Street Journal.
“Gran parte del Ministerio de Defensa y los agregados militares están buscando [armas soviéticas y rusas] en todo el mundo”, dijo Wallace en declaraciones a la prensa en Washington, donde este miércoles se reunió con el jefe del Pentágono, Lloyd Austin.
Según el ministro británico, 23 países tienen en sus arsenales equipos militares de fabricación rusa. “Si realmente quieres dárselos a los ucranianos mañana por la mañana para que puedan seguir luchando, encuentra en qué están entrenados, encuentra lo que necesitan”, agregó.
Los gobiernos de EE.UU. y el Reino Unido han presionado a países europeos como Bulgaria y Eslovaquia para que suministren sus armas soviéticas a Ucrania. A cambio, Washington y Londres han ofrecido reforzar su presencia militar en esas naciones para que se tranquilicen, o les han brindado garantías de seguridad u ofrecido reemplazar dichos equipos con armamento de fabricación occidental, reporta el diario.
Negocio redondo para los fabricantes de armas yanquis y europeos, los países ex-Pacto de Varsovia regalan armas antiguas (30 o más años) a Ucrania, Ucrania pone la sangre y ellos venden armas nuevas a esos países o les invaden con nuevas bases de las que ya nunca se irán salvo que les echen a tiros, como en Vietnam o Afganistán.
Los fabricantes de armas OTANianos llenan sus arcas, sus respectivos países reciben divisas exteriores y mantienen los empleos y con suerte debilitan al enemigo ruso.
Lo dicho, negocio redondo para los fabricantes de armas occidentales.