“Debo informarles: hace tres días, tal vez un poco más, desde el territorio de Ucrania intentaron atacar instalaciones militares en el territorio de Bielorrusia”, ha reprochado este sábado el presidente bielorruso, Alexander Lukashenko.
No obstante, el jefe de Estado bielorruso ha señalado que los sistemas de defensa aérea Pantsir lograron interceptar todos los referidos misiles, lanzados por las Fuerzas Armadas de Kiev.
De acuerdo con el mandatario de Bielorrusia, la ofensiva fue lanzada, mientras ningún soldado bielorruso está luchando en el territorio ucraniano, donde Rusia está realizando una operación militar, iniciada el 24 de febrero.
Por otro lado, hay “decenas” de camioneros bielorrusos retenidos en Ucrania, tal y como ha denunciado Lukashenko. “Han muerto dos camioneros y dicen que fue un bombardeo de los rusos. Han troceado los cuerpos de los muertos para que no se pueda saber que fueron tiroteados, pero lo hemos averiguado. ¿Esto qué es? ¿Nacionalismo? ¿Es nazismo? Esto es fascismo”, ha censurado.
Ante tal situación, el presidente bielorruso ha dejado claro que Minsk no busca una guerra con Kiev, sin embargo, el país luchará si hubiera una “invasión” del territorio bielorruso.
Las autoridades de Bielorrusia han advertido una y otra vez que el país responderá a una posible “agresión” a su patria por parte de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), encabezada por Estados Unidos.
Por su parte, el país euroasiático ha advertido de que un ataque a Bielorrusia equivaldría a un ataque a Rusia, por lo que hay un apoyo mutuo absoluto entre los dos países, incluso en el medio de su operación militar en Ucrania.
Esto, debido a que Minsk es el aliado más cercano de Moscú en la zona, y Lukashenko está constantemente en contacto con su par ruso, Vladímir Putin.