El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, confirmó este lunes que no se reanudará el suministro de gas a Europa a través del gasoducto Nord Stream producto de las sanciones que Occidente le ha impuesto al Estado ruso, así como a empresas de ese país.
De acuerdo a Peskov, se cierra uno de los grifos producto de los impactos generados por las sanciones, «las sanciones generan un desorden jurídico y práctico absoluto en todo lo relacionado con el servicio técnico de todos los equipos e instalaciones, pues por ahora solo queda confiar en que se podrá poner en marcha esa única turbina», acotó.
«Los problemas con el bombeo surgieron por las sanciones impuestas contra nuestro país y en contra de una serie de compañías por parte de Estados occidentales, incluyendo Alemania y el Reino Unido. No hay otros motivos que generen problemas para el bombeo», sentenció el portavoz ruso.
Cierre del gaseoducto #NordStream es una consecuencia directa de las políticas de sanciones de Occidente contra #Rusia, declaró el portavoz del #Kremlin, Dmitri Peskov @temasteleSUR pic.twitter.com/WhgVRhsCTj
— Odette Díaz Fumero (@OdetteteleSur) September 5, 2022
Ante el fallo de la turbina, la compañía Gazprom informó que el Servicio de Pervisión Técnica de Rusia (Rostejnadzor) alertó que el problema detectado hacía difícil garantizar la explotación segura de la turbina para abastecer de gas.
«La explotación de esa unidad compresora sin subsanar los fallos detectados crea un riesgo de incendio o explosión, lo que repercute en la seguridad industrial de toda la estación», explicó Gazprom.
El Nord Stream tenía operando un 20 por ciento de su capacidad el pasado mes de julio, donde transportaba 33 millones de metros cúbicos diarios a Europa, pero antes del anuncio contribuía a llenar las reservas de gas en Occidente.