Brnabic recordó en su cuenta de Twitter que los ministros de Exteriores del G7 pidieron en el comunicado de mayo que se respeten las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU a la hora de abordar «cualquier problema o crisis en el mundo [Libia, Siria, Yemen, Somalia y otros]».
«Ahora, sorprendentemente, el Ministerio de Asuntos Exteriores alemán declara explícitamente que la resolución 1244 del Consejo de Seguridad de la ONU, que estipula que Serbia tiene el derecho a solicitar el regreso de un determinado número de sus fuerzas de seguridad a Kosovo, debe ser ignorada porque es ‘inaceptable'», cuestionó Brnabic.
Se preguntó «en base a qué criterios» se decide qué resolución del Consejo de Seguridad de la ONU debe respetarse y cuál debe ignorarse, tildando las declaraciones de Baerbock de «un nivel de absurdidad sorprendente».
El 11 de diciembre, las fuerzas especiales de la Policía de Kosovo (ROSU) invadieron y ocuparon la represa de Gazivode, donde echaron a la guardia y retiraron banderas serbias. Esa represa es la principal fuente de agua y almacenamiento para la central hidroeléctrica de la zona. La mayor parte del lago se encuentra en el municipio de Zubin Potok, habitado mayoritariamente por serbios, al igual que otros tres distritos del norte de la provincia.
El 10 de diciembre, los serbios kosovares levantaron barricadas en las carreteras del norte de la república autoproclamada a causa de la detención por parte de las autoridades albaneses del expolicía Dejan Pantic, sospechoso de organizar actos terroristas.
El presidente serbio, Aleksandar Vucic, advirtió que Belgrado seguirá luchando oficialmente contra la cuestión de Kosovo y Metojia por todos los medios legales. Además, insistió en que Pristina debe formar una comunidad serbia, en línea con el acuerdo de Bruselas de 2013. Asimismo, prometió enviar una solicitud oficial al mando de la misión de la OTAN para el despliegue de la Policía y el Ejército serbio en dichos lugares de tensión, subrayando que estas acciones están en consonancia con la Resolución 1244 del Consejo de Seguridad de la ONU.
Amigos serbios, dejadlo correr. La canalla OTANiana os catalogó hace 30 años como los «malos» y harán todo lo posible por seguir castigándoos.
Habría que preguntarse si Rusia está lo bastante liada en Ucrania y Siria como para echaros una mano.