Dos militares retirados que dicen poseer información, representantes del Ministerio de Defensa, antropólogos y autoridades de la Institución Nacional de Derechos Humanos (Inddhh) visitaron con tal fin Çampo Vidiella, que forma parte del Batallón 14 de Infantería Paracaidistas, en el contiguo departamento de Canelones.
El diputado del Partido Ecologista Radical Intransigente (PERI), César Vega, informó a Montevideo Portal que la visita al predio militar “contó con todas las garantías de anonimato que había acordado” con los militares retirados y las autoridades.
“Después de los trámites que correspondan, harán una prospección”, anunció Vega, en referencia a tareas de exploración del terreno para determinar la posible existencia de restos óseos.
La visita a Campo Vidiella fue coordinada y dispuesta por las autoridades de la Inddhh, encargada, por la ley de la búsqueda de las personas detenidas y desaparecidas entre 1968 y 1975.
Tal gestión comprende la investigación de la verdad sobre las circunstancias de la desaparición y la ubicación de los restos.
Tras recibir la información de parte de militares retirados en enero, el diputado se reunió con el presidente Luis Lacalle Pou el 8 de febrero y dijo al mandatario que sus informantes “van a entregar el lugar donde se encuentra la mayoría de los desaparecidos”.
En el Batallón 14 y otros predios militares fueron hallados los restos de desaparecidos y asesinados por la represión en esos años.
De acuerdo con datos extraídos del Informe de la Comisión para la Paz (2003) y del Informe de las Fuerzas Armadas al Presidente de la República (2005) habría 20 personas desaparecidas cuyo destino final sería el Batallón 14.
Según Montevideo Portal aún hay 197 detenidos desaparecidos en Uruguay.
Es difícil q aparezcan , ojalá , al final de la dictadura los militares ordenaron la “Operación Zanahoria” está significaba , desenterrar a los asesinados por la dictadura e incinerar los restos en los crematorios del cementerio del Norte 🤷🏻♂️ esto se supo a raíz de indigentes q ingresaban por la noche a robar las piezas de metal de los cajones de los muertos para revender a chatarreros.Estos se escondían al ver llegar por las noches las camionetas del ejército,estando cerrado el cementerio. Y desde sus escondites veían lo que se hacía.