La capital de Sudán, Jartum, vive una escalada de violencia debido a los enfrentamientos entre el Ejército sudanés y las Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF). El jefe del Movimiento Popular de Liberación de Sudán-Norte (SPLM-N), Muhammad Mustafa, afirmó a «Sputnik» que las fuerzas externas, entre ellas la ONU, no han conseguido evitar estos choques.
El 15 de abril, la ciudad de Jartum se despertó con los sonidos de los tiroteos que se produjeron cerca de la base de las RSF, después de lo cual sus representantes anunciaron que los soldados del Ejército regular emplearon «toda clase de armas ligeras y pesadas» para atacar esta base.
«Obviamente, hubo razones para el levantamiento armado. Las prisas por alcanzar un acuerdo entre las autoridades militares y civiles y la falta de un verdadero consenso entre ellas sobre cómo configurar la política interior del país son posiblemente las principales razones de lo que sucedió», manifestó Muhammad Mustafa.
En la entrevista, el comandante Mustafa señaló que el actual Gobierno de Sudán exacerbó la situación en todos los sentidos. Asimismo, la escalada del conflicto puede estar relacionada con el fracaso del mecanismo de solución tripartito dirigido por el representante especial del Secretario General de la ONU para Sudán, Volker Perthes.
«Precisamente Perthes precipitó la ratificación del acuerdo, prefiriendo hacer la vista gorda ante una serie de problemas pendientes entorno al proceso», añadió.
La adopción de medidas en las que se enfrentaban las dos partes – el Ejército regular y las Fuerzas de Apoyo Rápido – y su posterior posición en lados diferentes del acuerdo llevó la situación a una fase explosiva.
El político sudanés cree que el bloque militar no debería entrar en conflicto entre sí, sino que debe seguir siendo una fuerza y un frente unido. Instó a las partes del conflicto a alejarse de la escalada e iniciar negociaciones para enfrentar a un enemigo más peligroso para ambos bandos.
«En caso contrario, los enemigos comunes, como los islamistas, pueden aprovecharse del statu quo. Y entonces existe un gran riesgo de perder el país para siempre», urgió Muhammad Mustafa.
El Movimiento Popular de Liberación de Sudán-Norte (SPLM-N) ya propuso a ambas partes las condiciones para la tregua. El jefe del SMPLM-N asegura que esto permitiría llegar a un entendimiento.
Desde el pasado 15 de abril, los enfrentamientos en Sudán han afectado al suministro eléctrico y las telecomunicaciones. Además, se ha informado de la muerte de más de 100 personas y se estima que centenares más han resultado heridas. Chad cerró sus fronteras con Sudán, y Egipto hizo un llamamiento al alto el fuego y a las negociaciones.
Las Fuerzas de Apoyo Rápido están formadas por antiguos milicianos que lucharon del lado del Gobierno sudanés durante la Guerra de Darfur entre 2003 y 2020.
FUENTE: «Sputnik Mundo»