Al Assoumi condenó en un comunicado la quema de un ejemplar del libro sagrado de los musulmanes en Estocolmo, el mismo día de una reunión de la Organización para la Cooperación Islámica para debatir los repetidos ataques contra el Corán.
El funcionario criticó el silencio de la comunidad internacional ante esos incidentes y alertó que afectan los esfuerzos para difundir principios de tolerancia y convivencia religiosa.
Hace una semana Al-Assoumi cuestionó a la Unión Europea al señalar que, aunque sus dirigentes afirman respetar los derechos humanos, violan uno de los más básicos: la libertad de religión.
La repetición de este atroz acto criminal en más de un país europeo confirma la difusión del odio religioso, afirmó entonces.
Asimismo, instó al Parlamento Europeo a emitir una legislación vinculante que tipifique como delito los ataques a la religión y el insulto a las diversas creencias.
También la Liga Árabe condenó en varias ocasiones la profanación del Corán tanto en Suecia como en Dinamarca.