Según el mandatario centroamericano, Washington vislumbra del conflicto de Ucrania el riesgo de una derrota total allí.
“Simplemente es parte de una estrategia, les interesaba a ellos abrir otro frente donde podían sumarse, juntarse”, expresó Ortega durante el acto conmemorativo del 47 aniversario del asesinato del héroe nicaragüense Carlos Fonseca Amador.
El presidente planteó que la debilidad de las fuerzas de seguridad de Israel frente al ataque del movimiento Hamás del 7 de octubre forma parte de una estrategia de Estados Unidos en colusión con el Gobierno hebreo.
“Eso ya ha acontecido en otros tiempos, el caballito de Troya, ¿por qué no abrir sus defensas para que las fuerzas palestinas que están en Gaza y que defienden, con todo derecho, el derecho a tener un Estado, una patria, para que ellos (Hamás) entren, golpeen como golpearon (a Israel)? Y luego viene la gran ofensiva, donde se juntan todos ellos (Occidente) cometiendo crímenes horrendos”, se cuestionó Ortega.
El gobernante de Managua calificó de “plan macabro” la premisa basada en el interés de los grandes capitales de Estados Unidos de incentivar el “negocio” de la guerra y la industria armamentista a través de la crisis en Oriente Medio.
“Han desatado este plan macabro, el responsable de este plan macabro, del que está al frente de este plan criminal es el imperialismo norteamericano, son los grandes capitales norteamericanos, los fabricantes de armas en los Estados Unidos, que están haciendo un enorme negocio y les importa poco la sangre que se está derramando en momentos que el primer ministro de Israel se está debilitando y habían grandes marchas por medidas tiránicas que había tomado él (Benjamín Netanyahu) allí en Israel, sin tomar en cuenta al pueblo”, apuntó.
“Y el pueblo israelita marchando en las calles condenándolo a él, pidiendo su renuncia, es el momento en el que el imperio yanqui echa a andar el plan que venía ya articulando, lo venía desarrollando con las fuerzas nazis de Ucrania enfrentadas a la Federación Rusa”, aseguró Ortega.
El presidente nicaragüense cuestionó que Occidente siga aprobando recursos millonarios para la compra de armas destinadas a Ucrania, pese al debilitamiento de sus fuerzas ante Rusia, que estimó que “acabará” con el nazismo.
“La guerra es entre Estados Unidos, Inglaterra, Alemania, todos los países europeos armando cada día más a Ucrania porque quieren derrotar a la Federación Rusa, porque saben que la Federación Rusa va a la alcanzar la victoria y va acabar con el fascismo en Ucrania”, afirmó el ejecutivo.
Solidaridad con Venezuela
Además, el presidente de Nicaragua acusó a Estados Unidos de querer propiciar “un baño de sangre” en América Latina al “activar” el conflicto entre Guyana y Venezuela por la soberanía del Esequibo, el cual afirmó que pertenece a Caracas.
“Ya están otorgando a las empresas norteamericanas, los gobernantes de Guyana, que es un pueblo valiente, (pero) el Gobierno conspirando con los yanquis, entregando concesiones petroleras en territorios que no le pertenecen a Guyana, territorio que ha pertenecido a Venezuela, pero acompañan estos contratos del desplazamiento de barcos de guerra de los Estados Unidos hacia la zona, buscando cómo abrir otro frente y tratando de desestabilizar a la República Bolivariana de Venezuela”, anotó.
