«Apenas podemos sostener nuestra defensa», confesó el soldado con nombre en clave Lemur al comentar sobre los los problemas que sufren los militares ucranianos en la crucial región de Járkov, donde está combatiendo.
El medio también ofreció un poco de franqueza sobre el conflicto ucraniano con un artículo en el que se reconocen las graves pérdidas de Ucrania en el noreste.
«Estamos perdiendo mucha gente, hay tantos cuerpos que no podemos traerlos todos de vuelta», cita The Times al soldado ucraniano.
La forma en que las fuerzas rusas han tomado la iniciativa en el frente y la posterior caída de la ciudad de Avdéyevka y varios pueblos cercanos han aumentado el pesimismo entre Ucrania y sus aliados, mientras Kiev sigue esperando que llegue más ayuda proveniente de Washington.
La liberación de Avdéyevka fue realizada por las tropas comandadas por el coronel general Andréi Mordvichev, informaron desde el Ministerio de Defensa ruso, que calificaron a esta urbe de la región de Donetsk como «un poderoso nodo defensivo de las FFAA ucranianas».
Rusia considera que las entregas de armas a Ucrania y el entrenamiento de sus militares impiden un acuerdo e involucran directamente a los países de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) en el conflicto, que «juegan con fuego». Serguéi Lavrov, ministro de Relaciones Exteriores ruso, advirtió que cualquier suministro que contenga armas para Ucrania sería un objetivo legítimo para Rusia.