La iniciativa, aunque dista mucho de satisfacer las demandas de guarderías infantiles permite la incorporación de más mujeres a diferentes ramas de la economía y los servicios en la provincia de Ciego de Ávila, a más de 400 kilómetros al este de La Habana.
La última de estas instalaciones para el cuidado de menores, es la quinta del municipio de Morón para la atención de 15 niños, en edades comprendidas entre dos y tres años, para beneficiar a madres de la cadena Islazul, en el sector turístico.
Los locales disponen de buenas condiciones para el total desarrollo del proceso de enseñanza-aprendizaje, en el cual los infantes reciben conocimientos sobre el comportamiento social, el cuidado de la naturaleza, la lengua materna, educación artística y otros.
Además, los centros están acondicionados con medios de entretenimiento y juegos, atención médica, servicio de alimentación, y un equipo de educadoras y auxiliares pedagógicas, para garantizar un adecuado bienestar a los niños
Estos espacios disponen de seguridad y confort y desarrollan actividades similares a los círculos infantiles, conscientes de que Cuba es un país defensor de los derechos de la infancia y la justicia social.