De acuerdo con estadísticas de esa instalación, 123 mil 300 personas del país vecino cruzaron el túnel internacional, lo cual significa un incremento de 108,6 por ciento.
Mientras, el flujo de chilenos en sentido contrario registró una contracción de 57,7 puntos porcentuales.
La explicación de esta tendencia estriba en la crisis económica que se vive en Argentina, donde los precios de los servicios y mercancías se dispararon y disminuyeron las importaciones provocando carestía de numerosos productos.
Si bien muchos de los viajeros aprovechan para visitar playas y centros recreativos en Chile, la verdadera razón es adquirir artículos en supermercados y grandes centros comerciales.
Además, empresas de transporte de larga distancia organizan viajes de compras con la posibilidad de ir y volver el mismo día, lo que hacían muchos chilenos hasta 2023.
Un estudio realizado por la Cámara Nacional de Comercio, Servicios y Turismo, señaló que estas visitas contribuyeron a impulsar las ventas minoristas en este país, que sólo en junio crecieron en 9,4 por ciento.
Además de alimentos, otros productos muy apetecidos por los argentinos son ropa, calzado y aparatos de alta tecnología, como celulares y computadoras portátiles, cuyo precio en Chile es tres veces inferior respecto a la nación trasandina.