En el marco de las celebraciones por la fundación de la República Popular China (1 de octubre de 1949), la Oficina Nacional de Estadísticas destacó que el Partido Comunista y el gobierno dieron prioridad al desarrollo de la mujer y la infancia, lo que resultó en transformaciones profundas en su estatus y una notable mejora en su salud.
De acuerdo con el informe, desde 1950 el gigante asiático desarrolló una red de servicios de salud materno-infantil que incluye instituciones especializadas, hospitales generales y centros de investigación en todo el país.
«Este sistema se ha fortalecido en los últimos años, integrándose en la red nacional de salud y abarcando tanto zonas urbanas como rurales», detalla el texto.
En 2022 el número de instituciones dedicadas al cuidado materno-infantil ascendió a tres mil 31, en comparación con los 426 existentes en 1950.
Según la Oficina Nacional de Estadísticas, la cantidad de hospitales infantiles aumentó de 25 en 1983 a 151 en 2022.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) clasificó a China como uno de los 10 países con mayor rendimiento en salud materno-infantil.
El informe también subraya la mejora continua en los servicios de atención materna: en 2023 las tasas de gestión del embarazo, chequeos prenatales, partos hospitalarios y visitas postnatales alcanzaron el 94,5 por ciento, 98,2 por ciento, 99,95 por ciento y 97,0 por ciento, respectivamente, incrementos significativos respecto a 1996.
En cuanto a la salud de las mujeres, la esperanza de vida media de las chinas aumentó en 11,61 años entre 1981 y 2020 hasta alcanzar los 80.88 años.
La tasa de mortalidad materna descendió de 88,8 por cada 100 mil nacidos vivos en 1990 a 15,1 en 2023, y las diferencias entre áreas urbanas y rurales se redujeron considerablemente.
Por otro lado, las tasas de mortalidad neonatal, infantil y de menores de cinco años también mostraron una notable reducción desde 1991, con cifras que disminuyeron hasta 2,8 por ciento, 4,5 por ciento y 6,2 por ciento en 2023, respectivamente.
El gigante asiático implementa actualmente un sistema de cobertura médica que beneficia a más de mil 300 millones de personas como parte del objetivo nacional de construir una «China saludable» para 2035.