«Creíamos que era imposible que se repitiera una atrocidad de esa naturaleza que, además, fuera amparada por las potencias mundiales, porque son corresponsables, los Estados Unidos, la Unión Europea, el G7, que tratan de dar lecciones de democracia, de derechos humanos, son los que soportan el Estado de Israel, son los que soportan el régimen de (Benjamín) Netanyahu», expresó Gil durante el Encuentro Internacional Antifascista.
Al respecto, opinó que el colonialismo es el causante de los ataques de Netanyahu contra el pueblo palestino.
«Ese enclave fascista del régimen de Netanyahu no es más también que una herencia del colonialismo, el colonialismo causante de la desgracia que está cometiendo el régimen de Netanyahu, fue el colonialismo que impuso un régimen externo a la cultura, a la idiosincrasia y a la historia de paz del pueblo árabe», comentó.
De igual manera, consideró que el exterminio de Israel contra Palestina es la peor atrocidad que ha conocido la humanidad en los últimos tiempos.
«Hoy esa realidad del fascismo la vemos expresada en múltiples crisis mundiales, la mayor de ellas, las más vergonzosa de todas, el genocidio, la política de exterminio nazi que aplica el régimen de Netanyahu en Palestina, no conocía la humanidad una atrocidad tan grande como la que hemos estado viviendo desde el mes de octubre del año pasado», acotó.
De igual manera, celebró que la resistencia libanesa derrote el intento de invasión contra ese país, liderado por EEUU.
El 7 de octubre de 2023, un ataque coordinado por Hamás contra más de 20 comunidades israelíes resultó en aproximadamente 1.200 fallecidos, alrededor de 5.500 heridos, y la captura de 253 rehenes, de los cuales cerca de 100 fueron posteriormente liberados en intercambios de prisioneros.
En represalia, Israel lanzó una declaración de guerra contra Hamás y emprendió una serie de bombardeos sobre Gaza que han dejado hasta el momento más de 44.000 muertos, en su mayoría niños y mujeres, y más de 104.200 heridos, según las autoridades médicas gazatíes.
Rusia y otros países instan a Israel y Hamás a pactar un alto al fuego y abogan por una solución de dos Estados, aprobada por la ONU en 1947, como la única vía posible para lograr una paz duradera en la región.