Lourenço agradeció el reconocimiento y dijo que no se le otorga a él como individuo, sino al pueblo angoleño en su conjunto, que siempre supo mantener los fuertes lazos de amistad y solidaridad con el pueblo sudafricano y su lucha contra el apartheid.
Añadió que esta condecoración es también una muestra del interés de ambos pueblos en mantener esas históricas relaciones forjadas en la lucha contra el racismo, por un bien común, por la libertad de los dos pueblos y el progreso social y desarrollo económico de ambos países.
La ceremonia de entrega de la Orden de Sudáfrica tuvo lugar como parte de la visita de Estado del mandatario angoleño a Pretoria, durante la cual Lourenço también acudió al Museo Memorial Parque de la Libertad, donde rindió homenaje a héroes angoleños y sudafricanos.
El espacio recoge los nombres de todos aquellos que murieron en las guerras de Sudáfrica, la Primera Guerra Mundial, la Segunda Guerra Mundial y durante la era del apartheid.
En el sitio, el visitante depositó una corona de flores y dejó palabras en el libro de honor, con las que rindió tributo a destacadas figuras que contribuyeron decisivamente a la eliminación del régimen del apartheid.
“Este lugar, de recogimiento y reflexión, es un eterno rayo de luz que nos recuerda cuánto vale la pena luchar por la Libertad de los Pueblos y de los Hombres, sin importar el precio que tengamos que pagar”, escribió Lourenço.
Añadió un reconocimiento para los hombres y mujeres que “con notable celo” cuidan el lugar, y ofrecen a los visitantes la certeza de que la historia de lucha y victoria que simboliza será preservada para las generaciones siguientes.