El secretario de Estado de EE.UU., Marco Rubio, ha mantenido una conversación telefónica con el ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov.
Rubio habló con Lavrov para informarle de las operaciones de EE.UU. contra los hutíes de Yemen, al tiempo que destacó que «no se tolerarán los continuos ataques de los hutíes contra buques militares y comerciales estadounidenses en el mar Rojo», informó el Departamento de Estado estadounidense.
Asimismo, abordaron las reuniones en Arabia Saudita y acordaron seguir trabajando para restablecer la comunicación entre EE.UU. y Rusia.
Desde el Ministerio ruso de Exteriores matizaron que la conversación se concretó a iniciativa de Washington y que la parte estadounidense «informó de la decisión tomada de iniciar una operación militar contra las fuerzas de los hutíes en la región del mar Rojo».
Lavrov destacó la necesidad del «cese inmediato del uso de la fuerza» y la importancia de que todas las partes «entablen un diálogo político con el fin de encontrar una solución que impida nuevos derramamientos de sangre».
«También trataron aspectos concretos de la aplicación de la comprensión mutua alcanzada en la reunión de altos cargos de Rusia y EE.UU. celebrada el 18 de febrero en Riad», agregó la Cancillería rusa.
En febrero, Lavrov y Rubio ya habían tenido una conversación telefónica. «Los ministros de Asuntos Exteriores acordaron mantener un canal de comunicación para resolver los problemas acumulados en las relaciones ruso-estadounidenses en aras de eliminar las barreras unilaterales a la cooperación comercial, económica y de inversión mutuamente beneficiosa heredadas de la anterior Administración», informaron desde la Cancillería rusa.
Asimismo, entonces los jefes diplomáticos expresaron su voluntad mutua de interactuar sobre cuestiones internacionales de actualidad, entre ellas el arreglo de la situación en Ucrania, el tema de Palestina y, en general, en Oriente Próximo y otras zonas.
Poco después, delegaciones de alto nivel de Rusia y EE.UU., compuestas por Lavrov y Rubio, entre otros, se reunieron en la capital de Arabia Saudita, Riad, con el fin de normalizar las relaciones entre ambas potencias y avanzar hacia un acuerdo sobre el conflicto en Ucrania.
Tras las conversaciones, las partes acordaron crear equipos de alto nivel para empezar a trabajar en la resolución del conflicto en Ucrania.
