Según comunicó el ente este lunes a la agencia de noticias BelTA, este fue el lote más grande de explosivos decomisado en la historia de Belarús, pues se incautaron 580 kilogramos de una sustancia muy potente de fabricación extranjera probablemente procedente de Estados Unidos.
La nota del Comité de Aduanas que el alijo se detectó cuando un hombre de 41 años cruzaba el puesto de control fronterizo de la ciudad de Brest en una camioneta Mercedes Benz, procedente de Polonia.
Tomando como base el, los aduaneros enviaron el vehículo para su escaneo mediante un complejo de inspección y control. En el escanograma se observó un oscurecimiento inusual en la zona del piso del vehículo, así como en la pared que separa los compartimentos de carga y de pasajeros, indicó el comunicado.
Después de ello se realizó una búsqueda en profundidad, como resultado de lo cual el piso y las paredes del automóvil fueron parcialmente desmantelados.
Estos lugares resultaron estar completamente llenos de una gruesa capa de una sustancia de color gris claro y amarillo claro, oculta bajo láminas aislantes de vibraciones y ruidos. Igualmente para evitar que los perros de servicio reaccionaran, los bordes internos de la carrocería fueron tratados con lubricante técnico, reza el informe.
La sustancia fue recuperada con la ayuda de especialistas competentes, y tras un examen de laboratorio, se confirmó que la sustancia detectada era un potente tetranitrato de pentaeritritol altamente explosivo con un peso total de más de 580 kilos.
El conductor fue detenido y la aduana de Brest abrió una causa penal contra el ciudadano y otras personas no identificadas en virtud del artículo penal «movimiento ilegal de explosivos a través de la frontera», subraya el comunicado. El conductor podría ser condenado a hasta 10 años de prisión.
