La Marina de Australia enfrenta una brecha de capacidad de 10 años que podría dejar al país vulnerable en caso de un conflicto armado en la región de Indo-Pacífico, según reporta South China Morning Post (SCMP). Siendo un importante aliado de EE.UU., el país podría no estar preparado para defenderse, lo que plantea serias preocupaciones estratégicas.
«No estoy segura de que nosotros, como nación, nos estemos tomando en serio el tema de la defensa», dijo Jennifer Parker, exoficial naval y experta naval de la Universidad Nacional de Australia.
Por su parte, el historiador militar John Storey afirmó en octubre del año pasado que su país está «atrapado en viejos métodos de combate, tecnología y pensamiento antiguos», por lo que el Ejército australiano «no tiene la capacidad de librar un conflicto prolongado contra un adversario poderoso».

«Australia no está adaptada a las realidades modernas de la guerra»
«No podemos reemplazar las pérdidas de equipo, no podemos fabricar nuestras propias municiones. No tenemos la capacidad de aumentar el tamaño de nuestras fuerzas de defensa en una crisis», aseveró. En conclusión, Australia «no está adaptada a las realidades modernas de la guerra».
Si bien el personal militar está bien entrenado, su flota consta de solo 10 barcos combatientes de superficie. Cinco de sus seis submarinos de la clase Collins no están en condiciones de navegar y necesitan reparaciones importantes. Además, sus dos barcos de reposición de flotas están fuera de servicio, y solo dos dragaminas permanecen operativos.

«Necesitamos estar listos a principios de 2027»
«Necesitamos estar listos a principios de 2027», dijo Michael Pezzullo, exsubsecretario de Defensa, asegurando que «ese parece ser el momento más temprano en que China estará lista para lanzar una operación militar contra Taiwán», lo que, según él, «podría desencadenar una guerra más amplia«.
Pezzullo afirma que el país debe mejorar múltiples aspectos de su defensa, como la vigilancia continua del área de interés militar, la preparación operativa de las tropas y las capacidades de guerra antisuperficie.

Un sistema «totalmente deficiente»
En 2021, Australia inició el camino hacia la adquisición de ocho submarinos de propulsión nuclear, al unirse a la alianza estratégica trilateral junto con el Reino Unido y EE.UU. (AUKUS). No obstante, la culminación de cinco de las naves está pautada para mediados de la década de 2050, y el resto para finales de la década de 2060, por lo que la defensa del país no puede contar con ellos para su necesidad urgente de mejorar capacidades.
Otro de los obstáculos de Australia parece ser la falta de personal. SCMP señala que la cantidad de jóvenes con deseo de unirse al Ejército ha disminuido notablemente, lo que, sumado a un sistema de reclutamiento privatizado, descrito por el ministro de Personal de las Fuerzas Armadas, Matt Keogh, como «totalmente deficiente», ha influido en el número de tropas.