De acuerdo con los medios locales, se trata de uno de los más violentos y amplios ataques de Tel Aviv desde la caída del gobierno de Bashar Al-Assad en diciembre del 2024, y ocurre 24 horas después de un bombardeo cerca del Palacio Presidencial en Damasco, la capital siria.
Las fuentes indicaron que las incursiones aéreas apuntaron contra el 41º Regimiento cerca del Hospital Militar de Harasta, en las afueras de Damasco, y contra las brigadas de reconocimiento, artillería y misiles ubicados en las montañas al nordeste de Damasco.
El sonido de la aviación bélica y de las explosiones se escuchó en toda la capital y sus alrededores, y según la agencia oficial SANA, dejó un muerto y varios heridos.
De igual manera, fueron reportados ataques en un batallón de misiles cerca de la aldea de Muthabin y el 175º Regimiento cerca de la ciudad de Izraa, en la gobernación de Deraa, mientras en la suroccidental gobernación de Quneitra, resultaron blanco las llamadas Colinas Rojas, consideradas uno de los sitios estratégicos en la zona.
La agencia SANA confirmó también bombardeos contra objetivos en las cercanías de la aldea de Shatha, en el noroeste de la provincia central de Hama, lo que causó lesiones a cuatro personas.
Otro ataque aéreo apuntó contra una abandonada brigada de Defensa Aérea en el estratégico Monte de Al-Sharaa, en la provincia de Latakia.
En su primer comentario oficial, el ejército israelí anunció que sus aviones de combate lanzaron ataques contra sitios militares, cañones antiaéreos e infraestructura de misiles tierra-aire en Siria.
La Corporación de Radiodifusión de Israel informó anteriormente que el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, y el ministro de Defensa, Yisrael Katz, aprobaron nuevos ataques contra objetivos en Siria, para enviar un mensaje directo al nuevo liderazgo.
La víspera, la Presidencia Siria condenó en los términos más enérgicos el bombardeo israelí contra el Palacio Presidencial en esta capital y lo consideró una peligrosa escalada contra las instituciones y la soberanía del país.
Este condenable ataque refleja los continuos e imprudentes empeños para desestabilizar el país y exacerbar la crisis y la situación de seguridad, ya que atenta contra la seguridad nacional y la unidad del pueblo sirio, afirmó una declaración de la Presidencia publicada en su canal de Telegram.
Hizo un llamamiento a la comunidad internacional y a los países árabes para que apoyen a Damasco frente a estas agresiones que violan las leyes y convenciones internacionales.
Los ataques israelíes contra Siria se intensificaron dramáticamente tras la caída del régimen de Bashar al Assad el 8 de diciembre pasado y lanzaron cientos de agresiones contra instalaciones militares sirias, con el objetivo de impedir la reconstrucción de su infraestructura.
Estas agresiones coincidieron con incursiones terrestres en las zonas rurales de Damasco, Quneitra y Deraa, donde las fuerzas de ocupación tomaron el control de la zona de amortiguación y luego avanzaron para realizar incursiones en zonas fronterizas.