De acuerdo con el sondeo, consignado en el diario South China Morning Post, ninguna de las principales empresas estadounidenses tiene planeado elaborar sus productos en EEUU.
Esto pese a que el presidente Donald Trump dijo que el objetivo del establecimiento de aranceles a las importaciones es forzar a las empresas locales a fabricar sus bienes en el país norteamericano, que en las últimas décadas ha sufrido un fuerte proceso de desindustrialización.
Sin embargo, de acuerdo con la propia AmCham, el plan no parece estar funcionando por el momento. En ese sentido, la cámara de comercio afirma en el documento que ninguna compañía les respondió que están trasladando su producción de vuelta a EEUU o que están en proceso de hacerlo.
En cambio, el informe sí afirma que algunas compañías sondeadas están considerando mover «parte de su producción» a terceros países.