Un alto dirigente del Movimiento de Resistencia Islámica de Palestina (Hamás), Osama Hamdan, denunció que Israel transformó la Franja de Gaza en un «campo de concentración nazi», llevando a cabo un genocidio contra su población.
Durante una intervención televisada el lunes por la noche, Hamdan, miembro del politburó de Hamás, enfatizó que esta acusación coincide con una sesión de emergencia del Consejo de Seguridad de la ONU destinada a debatir la catastrófica situación humanitaria en la Franja de Gaza.
Según Hamdan, Israel está matando de hambre deliberadamente a los palestinos al bloquear la entrada de miles de camiones con ayuda humanitaria al territorio.
Se ha reportado que 22.000 camiones de ayuda permanecen esperando en los cruces fronterizos, mientras la Franja sufre una grave escasez de leche maternizada y suministros sanitarios esenciales para combatir el hambre.
Hamás sostiene que estas acciones, que incluyen la muerte de más de 1.500 palestinos en centros de distribución de ayuda humanitaria, son parte de una política sistemática de hambruna contra la población de Gaza.
La situación humanitaria es crítica: el número de víctimas de hambre ha alcanzado las 180 personas, incluyendo 93 niños, y un alarmante 96 por ciento de las familias en Gaza enfrentan inseguridad alimentaria.
Organizaciones como Unicef alertaron que una de cada tres personas en Gaza pasa días sin comer, y la Agencia de Naciones Unidas para la población refugiada de Palestina en Oriente Próximo (Unrwa) señaló que Gaza se ha convertido en un «cementerio de niños».
Desde octubre de 2023, el Ministerio palestino de Salud ha registrado el asesinato de más de 61.149 palestinos en Gaza, con un promedio de 28 niños muriendo cada día por hambre y ataques.
El alto funcionario de Hamás también enfatizó que el silencio de la comunidad internacional y de las instituciones de la ONU impone una responsabilidad moral y humanitaria ante la guerra de Israel.
En cuanto al trato de los prisioneros, Hamás afirmó que la Resistencia palestina trata a los cautivos de acuerdo con los valores y principios islámicos, compartiendo el mismo sufrimiento que el pueblo de Gaza.
En este sentido, la Resistencia palestina expresó su disposición a cooperar con organismos internacionales como la Cruz Roja para proporcionar alimentos y medicinas a los prisioneros israelíes, e insistió en la necesidad de obligar a la ocupación a abrir de manera normal y permanente los corredores humanitarios para el paso de alimentos y medicinas a la población palestina.
