El líder del movimiento Ansarullah en Yemen, Sayyed Abdelmalik Al-Huzí, declaró que «la prohibición de navegación israelí es estricta en el Mar Rojo, el Golfo de Adén y el Mar Arábigo, mientras que el puerto de Umm al-Rashrash continúa afectado por las operaciones de las fuerzas armadas yemeníes que apoyan a la resistencia en la Franja de Gaza».
En un discurso pronunciado el jueves, Sayyed Al-Huzí indicó que «estas operaciones continúan esta semana, incluyendo dos ataques hacia el norte del Mar Rojo, dirigidos contra dos buques que violan la prohibición», según Sayyed Al-Huzí.
En este contexto, Sayyed Al-Huzí anunció que «el número total de operaciones llevadas a cabo durante el mes de Safar (desde finales de julio) asciende a 42 hasta la fecha, utilizando misiles hipersónicos y drones».
La aprobación del desarme de la resistencia en Líbano y Palestina constituye un apoyo directo a la ocupación.
Además, Sayyed Al-Huzí enfatizó que “la adopción del desarme de la resistencia en Líbano y Palestina constituye un apoyo directo a la ocupación israelí”.
Sayyed Al-Huzí señaló que “el estancamiento de los países árabes e islámicos ante los crímenes de la ocupación en Gaza es una decisión política, no una coincidencia”.
Sayyed Al-Huzí criticó el apoyo de algunos regímenes árabes a la ocupación, subrayando que “el régimen saudí brinda apoyo militar directo al enemigo, y el acuerdo egipcio de 35 mil millones de dólares con la ocupación constituye un apoyo directo al enemigo con el pretexto de obtener gas”.
Sayyed Al-Huzí advirtió que “el plan concreto del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, para crear un Gran Israel busca controlar la región y subyugar a su población, mientras que los países árabes se conforman con declaraciones en papel sin tomar medidas concretas”.
La ocupación está cometiendo el crimen del siglo en la Franja de Gaza.
En su discurso, Sayyed Al-Huzí también abordó la situación en la Franja de Gaza, subrayando que «la ocupación israelí ha cometido los crímenes más atroces esta semana, con bombardeos y hambruna, que han causado cientos de mártires y miles de heridos, mientras que un cuarto de millón de niños palestinos corren el riesgo de una muerte lenta por inanición y desnutrición».
Sayyed Al-Huzí describió «la magnitud del sufrimiento en la Franja de Gaza a causa de la hambruna practicada por la ocupación israelí como horrorosa», y enfatizó que «los actos de la ocupación en la Franja de Gaza constituyen el crimen del siglo y de la era».