
Durante la celebración de la reunión, en compañía de la primera combatiente Cilia Flores, los vicepresidentes sectoriales y del Buró Político del Partido Socialista Unido de Venezuela, el mandatario elogió la fuerza gigante de este proceso popular que se ha levantado como columna del desarrollo económico y de la paz en todo el país.
A juicio del jefe de Estado, nunca se había visto jamás un proceso de democracia y participación de la clase obrera y de un país, que camina sobre los brazos de su clase trabajadora.
“Nunca jamás hubo un proceso tan democrático y participativo, bajo el principal poder de la conciencia y el amor por la patria venezolana, que la clase obrera lo tiene a flor de piel”, subrayó.

Al evaluar el proceso realizado en ocho semanas, Maduro significó que fue verdaderamente exitoso, ejemplar, único, extraordinario y “nunca antes visto ni imaginado”.
Recordó que Venezuela tiene 25 semanas de agresiones que va desde el terrorismo psicológico hasta la piratería de los corsarios que asaltaron el barco petrolero, y resaltó que la República Bolivariana demostró, con todos los sectores, que es un país fuerte y tiene un poder verdadero. “Estamos preparados para seguir nuestra marcha y acelerar la Revolución profunda que le dé el poder al pueblo completo y definitivamente sin intermediarios”, aseguró.
El gobernante significó que tienen el método, el proceso popular constituyente y lograron el despertar, un renacimiento, una resolución como “un gran Lázaro colectivo del movimiento obrero venezolano”.
Al presentar un resumen del proceso, el ministro para el Proceso Social del Trabajo Eduardo Peñate informó que se realizaron 22 mil 110 asambleas de base donde se eligieron 66 mil 330 delegados e igual número de suplentes de todos los sectores de la economía y los servicios, tanto públicos como privados.
Planteó que más de cinco mil propuestas fueron sistematizadas primero y sintetizadas después, vinculadas con los 14 Motores de la Agenda Económica Bolivariana, sector por sector, y debatidas en 10 mesas de trabajo durante dos días de trabajo.

Entre las conclusiones, se planteó la creación de una Comisión Nacional de Transición, la cual deberá presentar un cronograma a concluir en 18 meses; definir nuevos estatutos y diseño de la nueva metodología de elecciones para todas las instancias y cuyos líderes sean trabajadores activos en planta y con mandato revocable.
A tono con los planes de Gobierno, los trabajadores propusieron la sustitución de importaciones, la fabricación de partes, piezas e insumos; recuperación de la maquinaria paralizada y reducir la dependencia tecnológica foránea.
En el caso de la defensa integral acordaron la activación de los cuerpos de combatientes de la clase obrera en todos los centros de trabajo públicos y privados y articularlos con las Unidades Comunales de Milicias y las Milicias Bolivarianas en todos los territorios.

