El 26 de octubre de 2022, un agresor abrió fuego a ciegas contra los fieles en el mausoleo, donde se halla la tumba de Ahmad Bin Musa, hermano del Imán Reza (la paz sea con él), y mató a 15 peregrinos e hirió a otras decenas. El grupo terrorista Daesh se atribuyó la responsabilidad del ataque mortal.
Posteriormente, el atacante, un integrante del grupo terrorista Daesh, fue declarado muerto en un hospital tras sufrir heridas de bala durante enfrentamiento con las fuerzas de seguridad en el recinto de Shah Cheraq.
Durante la última sesión de un tribunal en la ciudad de Shiraz este miércoles, el tercer sospechoso del ataque terrorista, identificado como Naim Hashem Qetali, de nacionalidad afgana, dijo que se unió al grupo terrorista Daesh cuando aún estaba en Afganistán.
Llegó a Irán en busca de trabajo, pero más tarde uno de los cabecillas de Daesh en Afganistán le pidió que hospedara a un invitado que identificó como Abdulá Said. Confesó haber hecho preparativos para apoyar al principal atacante en Teherán y se declaró culpable de ayudar directamente al atacante y apoyar financieramente a los miembros del grupo. Sin embargo, declaró que no tenía conocimiento previo de los detalles del ataque terrorista en Shiraz.
El tribunal acusó a Qetali de ayudar e incitar a la “corrupción en la tierra” a través de la participación financiera y el apoyo a elementos de Daesh en Irán. El presidente del tribunal, el juez Seyed Mahmud Sadati, pospuso la continuación de la audiencia del caso para los próximos días.
Un grupo de sospechosos fue capturado de inmediato y, a mediados de febrero, el Ministerio de Inteligencia iraní anunció el arresto de 42 miembros de una red que apoyó el incidente terrorista, indicando que los perpetradores eran ciudadanos de Azerbaiyán, Tayikistán y Afganistán, y ninguno era iraní.
Las autoridades de Irán, incluido el presidente, Seyed Ebrahim Raisi, prometieron vengarse de los enemigos por el atentado de Shiraz. “La experiencia muestra que los enemigos de Irán, al no poder crear una división en las filas unidas de la nación, se vengan a través de la violencia y el terror. Este mal definitivamente no quedará sin respuesta”, remarcó el mandatario.
El Líder de la Revolución Islámica de Irán, el ayatolá Seyed Ali Jamenei, a su vez, prometió que los responsables del atentado recibirán sin duda un duro castigo.