Este sábado, el presidente Gustavo Petro acusó este sábado al presidente estadounidense Donald Trump y al senador Marco Rubio de ser “mentirosos” por impulsar, bajo el pretexto de la lucha contra el narcotráfico, operaciones militares en el Caribe que han dejado más de 70 muertos, contra los cuales no exitía prueba alguna de que fueran narcotraficantes, así como se desconoce totalmente la identidad de casi todos.
Durante su intervención en la III Cumbre Social de los Pueblos de América Latina y el Caribe, celebrada en Santa Marta, Petro denunció una campaña de violencia e injerencia por parte de Estados Unidos —orientada al saqueo de los recursos estratégicos de la región y a obtener el control militar de la misma— y advirtió: “No despierten al jaguar”.
En una vibrante alocución, el mandatario colombiano usó una poderosa metáfora continental: “Yo le diría a Rubio, y a Trump, ‘cuidado, están atravesando el Caribe de los libertadores, se están metiendo con la patria de Bolívar’”. El “jaguar americano”, símbolo de la resistencia latinoamericana, se despierta, según Petro, para defender al cóndor —emblema de las naciones suramericanas— frente al águila dorada, representación de la hegemonía estadounidense.
Petro exige justicia ante asesinato de colombianos inocentes
El caso de Alejandro Carranza, un pescador pobre y padre de dos hijos, se convirtió en el eje de su denuncia. “De aquí salió un pescador pobre. Alejandro Carranza se llamaba. Padre de una niña y, sin embargo, le cayó un misil y lo mató a él y a otros”, relató el presidente. Añadió: “Hubiera sido pez lo que llevaba o fuese cocaína, él no tenía pena de muerte y no tenían por qué haberlo asesinado”. Y reiteró: “Nadie puede decir que ese pescador pobre fuese un narcotraficante. Me opongo a ello”.
Petro subrayó que las operaciones estadounidenses —presentadas como lucha antinarcóticos— carecen de control judicial y violan la soberanía colombiana. Denunció que los verdaderos narcotraficantes “han ido a través de sus políticos a las oficinas en Miami a hablar con los senadores del señor Rubio, a pedir que aquí también bombardeen, a tratar de humillarnos. Y Colombia no se deja humillar”.
En tono firme, afirmó: “Mentiroso Trump y sus amigos, mentiroso señor Rubio. Lo que estáis matando no son narcotraficantes”, y llamó a revivir la Gran Colombia para “unir el sueño bolivariano de nuevo y ser poderosos”.
Cabe recordar que, por su enfrentamiento a las órdenes injerencistas de Trump, EE.UU. ha anunciado sanciones del Departamento del Tesoro estadounidense contra Petro, su esposa y su hijo, acusándolos de convertir a Colombia en una “guarida de drogas”, sin aportar una evidencia de lo que afirman.
Petro incluyó en su discurso una reflexión más amplia sobre el estado del mundo: “La democracia ha muerto en el mundo y lo que prevalece es la barbarie”, criticando un sistema capitalista que “antepone las ganancias a las vidas humanas”. En este contexto, su advertencia resuena como un llamado continental: si el jaguar americano se despierta, será para defender no solo a Colombia, sino a toda la patria de Bolívar.


