Artículos

Una nueva fase de la guerra

Después de meses de impasse sin grandes avances en el frente y bloqueo absoluto en el frente diplomático, las últimas dos semanas han causado una serie de cambios por los cuales se puede hablar ya de una nueva fase de la guerra. Aunque aparentemente menos tectónicos que los producidos el 24 de febrero con el inicio de la intervención militar rusa, los actuales movimientos suponen una nueva situación tanto en términos políticos como militares.

Novorossia vuelve a casa

Todos parecen muy sorprendidos con los pasos dados. Ignoran que era sobradamente conocido que Donetsk y Lugansk deseaban unirse a la Federación Rusa y llevan años hablando de un referéndum de autodeterminación en tal sentido. Pero no eran las únicas, tras el golpe de estado del Maidan y la llegada al poder político y militar de una legión de neonazis...

La función de la guerra en el capitalismo global

Para el capitalismo (o liberalismo, como muchos también lo definen), los únicos balances válidos son los contables.

Las olas de calor ni son más frecuentes ni más largas que antes en todo el mundo

La tesis de que las olas de calor son ahora más frecuentes y más largas que en el pasado es incierta, ya sea porque los datos anteriores a 1950 son escasos o se ignoran por completo.

Pablo Hasél desde la prisión de Ponent. Con virus estomacal, y pésima alimentación

Pablo Rivadulla Duró (C.P. Ponent).— Hola ¿qué tal?   Por aquí al fin he conseguido -tras presionar durante meses- fecha para la inspección estomacal que me...

Ucrania: Hermanos Kononovich, 200 días presos

Retazos del juicio contra los Kononovich por ser comunistas.

¿Ganará Ucrania la guerra?

El plan de batalla ucraniano tiene estampado el sello “Hecho en Bruselas” por todas partes. La composición de la fuerza fue determinada por la OTAN, al igual que el momento y la dirección de los ataques

Ahora sí, ya hay guerra

Hasta ahora la crisis de Ucrania era, básicamente, una guerra civil: las milicias de Donestks y Luganks eran las que estaban en primera línea en la mayoría de los frentes (este y sur), con el respaldo decisivo de las fuerzas rusas que sólo ocupaban esa primera línea cuando la cosa se ponía fea. La situación ahora se invierte porque con la declaración de Putin de esta mañana ya no serán las milicias las de primera línea sino el ejército ruso. Occidente quería la guerra. Ya la tiene.