Con su ejemplo, construyó junto a su pueblo el presente y el futuro de la Patria. Foto: Valiente, Jorge
En una reciente visita al cementerio de Santa Ifigenia, en Santiago de Cuba, me detuve varios segundos –tal si fueran horas– frente a aquella piedra-símbolo, encargada de proteger en su corazón, las cenizas o más bien la esencia de Fidel Castro, el Comandante en Jefe de todos los cubanos…
Elson Concepción Pérez internet@granma.cu
En una reciente visita al cementerio de Santa Ifigenia, en Santiago de Cuba, me detuve varios segundos –tal si fueran horas– frente a aquella piedra-símbolo, encargada de proteger en su corazón, las cenizas o más bien la esencia de Fidel Castro, el Comandante en Jefe de todos los cubanos.
Unos meses antes, en Birán, su tierra natal, junto a un grupo de estudiantes de periodismo, pude traer a la memoria esos años de infancia en aquel lindo paraje que trascendieron las tierras orientales para, ya joven, desde las aulas de la Escuela de Derecho en la Universidad de La Habana, aglutinar a quienes lo acompañaron en su andar de revolucionario capaz de concebir, llevar adelante y hacer triunfar la Revolución en la Patria, por más de un siglo mancillada por tiranos internos e imperios externos.
Ahora, cuando el 13 de agosto cumple 91 años de vida, vienen a mi mente recuerdos anteriores a estas dos visitas llenas de simbología. Nunca había podido ni querido imaginar que un hombre tan grande y tan necesario pudiera dejar de acompañarnos físicamente. Y es que uno se aferra a no creer que la vida es solo un espacio de tiempo, que comienza y acaba y lo que queda es lo que cada ser humano pudo sembrar en su tránsito por ella.
Fidel sembró mucho. Valor, ejemplo, honestidad, transparencia, firmeza. Y sobre todo, creyó en los seres humanos y dedicó su vida a luchar por un mundo mejor, equitativo y solidario.
Por razones de trabajo como periodista, pude reportar encuentros suyos con macheteros millonarios.
El paso del ciclón Flora por las bajas tierras entre Bayamo, Holguín y Las Tunas, había provocado muchas personas muertas y arrasado con viviendas, escuelas, poblados.
Unos años más tarde fui testigo de alguna de sus frecuentes visitas a esa región oriental en la que se levantó el mayor plan hidráulico de la Isla, con presas y canales, de manera que el necesario líquido pudiera ser represado y luego llevado a los campos agrícolas, a los bateyes de centrales azucareros y granjas, sin que se corriera el peligro de que las grandes avalanchas de agua volvieran, como en el Flora, a acabar con la vida de muchas personas.
Recuerdo a Fidel en una tarde habanera cuando se presentó en una de las nuevas escuelas construidas en la entonces provincia La Habana y allí, junto a alumnos y profesores, intercambió sobre los uniformes escolares, el largo en el caso de las sayas de las niñas y otros detalles. Él lo indagaba todo pero fue el criterio colectivo el que primó para decidir el diseño del uniforme.
Su sonrisa pícara cuando aquellos muchachos hacían alguna observación a los atuendos escolares que portarían, lo mostraba feliz y a la vez cómplice de aquella tierna imaginación de los niños cuando ajustaban sus blusas o camisas, o estiraban la saya o el pantalón para llegar al largo correcto.
A Fidel lo recordamos todos en sus múltiples visitas al Contingente Blas Roca, donde chequeaba personalmente los avances de las obras viales y otras encomendadas por él a aquella fuerza constructora de vanguardia.
Lo imagino ahora, desde el interior de la roca que lo protege, observar todos los sitios de Cuba, los municipios más intrincados, el llano y las montañas, las ciudades y los barrios, que tantas veces visitó para tomar con sus propias manos el pulso de las construcciones de los consultorios del médico y la enfermera de la familia, los policlínicos, los hospitales, los centros científicos, embrión de los grandes laboratorios de investigación y producción de medicamentos únicos salvadores de vida o que contribuyen a la calidad de la misma.
El Fidel de Cuba inauguró escuelas, tecnológicos, universidades, escuela de cine y otras tantas. Y no solo pensó en los jóvenes cubanos que se formarían en ellas, sino en ese extraordinario proyecto llamado solidaridad, que permitió que decenas de miles de jóvenes de todo el planeta, de las capas más pobres de la sociedad, vinieran a Cuba y se formaran aquí como médicos, profesores, técnicos, ingenieros y en otras disciplinas.
También concibió enviar profesores y especialistas cubanos, principalmente en las ramas de la salud y la educación, a los más apartados parajes de la geografía africana o latinoamericana y allí salvar vidas y curar enfermedades o enseñar a leer y escribir con el novedoso método Yo si puedo, del que emergieron de la oscuridad del analfabetismo y les llegó la luz de la enseñanza.
Algo tan extraordinario como la Operación Milagro, ideada por Fidel es hoy reconocida en el mundo como uno de los aportes más humanos para que millones de personas invidentes o débiles visuales, pudieran recobrar su vista y ver la vida por primera vez o recuperar esa imagen que habían perdido.
Fidel, para Cuba y los cubanos, para América Latina y los latinoamericanos y caribeños, para los africanos y otras poblaciones de todo el mundo, es el imprescindible.
Su ejemplo, desde el interior de aquella roca que lo anida en la necrópolis santiaguera, tenemos que hacerlo presente cada día, no como recuerdo de una u otra fecha, sino como constancia de que está entre nosotros, que mira cada acción que hacemos, nos evalúa y nos insta a continuar y perfeccionar la obra grande que él empezó y llevó a su consolidación.
Los asesinatos de líderes sociales continúan registrándose en Colombia. | Foto: eldiario.es
Este viernes se conoció que Fernando Asprilla fue asesinado en el departamento del Cauca.
El líder social colombiano Fernando Asprilla fue asesinado este viernes en el departamento del Cauca. Se trata de la tercera muerte registrada en 72 horas.
El Defensor del Pueblo, Carlos Alfonso Negret Mosquera, evidenció en un reciente informe que durante el período comprendido entre el 1 de enero de 2016 y el 1 de marzo de 2017, ocurrieron 156 homicidios, 5 desapariciones forzadas y 33 casos de atentados.
Según Negret una de las principales causas de este fenómeno es la pretensión de los grupos armados ilegales de ocupar los espacios del territorio abandonados por las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia-Ejército del Pueblo (FARC-EP) en su desmovilización.
Las víctimas son líderes sociales y defensores de derechos humanos de los departamentos de Antioquia, Arauca, Atlántico, Bolívar, Caldas, Caquetá, Casanare, Cauca, Cesar, Córdoba, Cundinamarca, Chocó, Huila, La Guajira, Magdalena, Meta, Nariño, Norte de Santander, Putumayo, Risaralda, Santander, Tolima y Valle del Cauca.
Una de las exigencias vitales de las FARC-EP desde que comenzaron los diálogos de paz ha sido iniciar el desmontaje del paramilitarismo en Colombia. La posición del Gobierno ha sido desconocer su existencia alegando que durante el mandato de Álvaro Uribe entre los años 2006 y 2008, cerca de 32.000 paramilitares fueron desmovilizados.
Pero dirigentes insurgentes señalan que esos grupos paramilitares pasaron a ser catalogados por el Gobierno como bandas criminales, las que continúan amenazando, fustigando y asesinando a los líderes y movimientos sociales que luchan por el derecho a la tierra.
El ataque sistemático contra líderes sociales y defensores de derechos humanos, así como la estigmatización y persecución en contra de movimientos y organizaciones sociales se mantiene. La comunidad colombiana que reside en las zonas antes mencionadas esperan que le Gobierno de Juan Manuel Santos haga esfuerzos para evitar más muertes en el futuro.
Los activistas antiguerra protestan frente a la embajada de EE.UU. en Londres, capital británica, 11 de agosto de 2017.
Los manifestantes denunciaron las políticas belicistas del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y pidieron frenar una eventual guerra nuclear emprendida por el magnate inmobiliario.
Los participantes en el evento protestaron contra las crecientes tensiones entre Estados Unidos y Corea del Norte, que según ellos, se están profundizando por las declaraciones «inflamatorias» de Trump contra Pyongyang, pues podrían desembocar en una confrontación catastrófica.
Washington y Pyongyang han intensificado el intercambio de amenazas desde que el líder norcoreano, Kim Jong-un, anunció que ahora es capaz de atacar el territorio estadounidense con un misil balístico intercontinental (ICBM, en inglés), con capacidad de portar una ojiva nuclear.
En respuesta, el inquilino de la Casa Blanca dijo a Corea del Norte que se enfrentará al «fuego y la furia», si amenaza a Estados Unidos. También advirtió a Pyongyang que sus acciones conllevarían el «final de su régimen y la destrucción de su pueblo».
A partir de las amargas experiencias dejadas por el azote del huracán Flora en octubre de 1963, Fidel dedicó especial atención a la construcción de obras hidráulicas con la finalidad de evitar la repetición de inundaciones de gran magnitud. Foto: Archivo
Cuando el 25 de abril del 2017 el Consejo de Ministros aprobó el Plan de Estado para el Enfrentamiento al Cambio Climático (Tarea Vida), el país ratificaba una vez más su posición de avanzada a nivel mundial en la lucha contra lo que es considerado el más grave desafío ambiental a encarar por la humanidad en la presente centuria
Orfilio Peláez orfilio@granma.cu
Cuando el 25 de abril del 2017 el Consejo de Ministros aprobó el Plan de Estado para el Enfrentamiento al Cambio Climático (Tarea Vida), el país ratificaba una vez más su posición de avanzada a nivel mundial en la lucha contra lo que es considerado el más grave desafío ambiental a encarar por la humanidad en la presente centuria.
Sustentado en un rico caudal de resultados científicos y tecnológicos acumulado durante más de 20 años de investigaciones durante las cuales pudieron identificarse los impactos actuales y futuros de dicho proceso sobre el archipiélago cubano, se trata de un programa conformado por cinco acciones estratégicas y 11 tareas, dirigido básicamente a contrarrestar los posibles daños en las zonas vulnerables, preservando ante todo la vida de las personas.
Tan notable arsenal de conocimientos tuvo entre sus antecedentes el estudio denominado Impacto del cambio climático y medidas de adaptación en Cuba, desarrollado en la década de los 90 del siglo XX y donde intervinieron alrededor de 100 especialistas de 13 centros científicos.
Su principal aporte fue mostrar que había una clara tendencia al aumento de la temperatura media y a la elevación del nivel del mar, además de calcular los probables escenarios del futuro comportamiento del clima en la Mayor de las Antillas en cuatro plazos de referencia: 2010, 2030, 2050 y 2100.
Luego de una minuciosa evaluación de las afectaciones ocasionadas por los huracanes Charley e Iván al occidente cubano en agosto y septiembre del 2004, respectivamente, se elaboró la Directiva No. 1 sobre la Planificación, Organización y Preparación del País para Situaciones de Desastres, refrendada por el General de Ejército Raúl Castro Ruz el primero de junio del 2005, en su entonces condición de vicepresidente del Consejo de Defensa Nacional.
En cumplimiento de lo estipulado en ese documento, en el 2006 comenzaron los Estudios de Peligro, Vulnerabilidad y Riesgos, centrados inicialmente en eventos de inundaciones por intensas lluvias, penetraciones del mar y la ocurrencia de fuertes vientos.
Un año después y luego de analizar por primera vez el asunto del cambio climático en el Consejo de Ministros, el gobierno dio luz verde a un programa de enfrentamiento, que priorizó la adaptación en los sectores económicos y sociales, enfocado hacia la zona costera y vinculado con la reducción de desastres en el futuro.
Se acordó igualmente intensificar las investigaciones científicas, las cuales se integraron en el Macroproyecto sobre Peligros y Vulnerabilidad de la zona costera cubana para los años 2050 y 2100, que involucró a cerca de 300 especialistas de 16 instituciones de cinco organismos de la Administración Central del Estado, conducido por el Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente (Citma).
Este último fue presentado en el Consejo de Ministros el 25 de febrero del 2011, aprobándose seis directivas y un plan de acción para implementarlo en la etapa 2011-2015.
Dentro de sus resultados más notables figura haber identificado que el ascenso gradual del nivel medio del mar es a largo plazo la principal amenaza del cambio climático en Cuba, dada sus implicaciones futuras en la pérdida paulatina de áreas costeras localizadas en zonas muy bajas y la salinización de los acuíferos abiertos al mar.
Puso de manifiesto también que en lo inmediato, las inundaciones costeras ocasionadas por la sobrelevación del mar y el oleaje producido por huracanes, frentes fríos y otros eventos meteorológicos extremos, representan el mayor peligro para nuestro archipiélago tomando en cuenta la destrucción que causan al patrimonio natural y a la infraestructura dispuesta en el litoral.
Ya en el 2016 la máxima dirección del país recomendó presentar un Plan de Estado basado en todas las evidencias científicas validadas y los nuevos conocimientos que obtienen nuestros investigadores sobre las afectaciones del cambio climático en el archipiélago cubano, y las acciones de mitigación y adaptación requeridas.
Como planteó la ministra del Citma Elba Rosa Pérez Montoya ante los diputados a la Asamblea Nacional reunidos en el Palacio de las Convenciones en julio pasado, la Tarea Vida tiene un alcance y jerarquía superiores a todo lo aprobado anteriormente en relación con el tema, y su instrumentación demandará un programa de inversiones progresivas a corto (2020), mediano (2030), largo (2050) y muy largo plazo (2100).
Representa, sin duda, la expresión práctica más abarcadora del compromiso del Gobierno Revolucionario de trabajar desde ahora por la protección de las actuales y futuras generaciones de cubanos frente a las consecuencias del cambio climático.
AMBIENTALISTA DE TALLA MUNDIAL
Solo un hombre con la fe y visión de Fidel, empeñado en mirar el mañana como algo inmediato, pudo colocar a la ciencia y la tecnología dentro de las prioridades de la naciente Revolución Cubana, cuando el 15 de enero de 1960 afirmó con énfasis «El futuro de nuestra Patria tiene que ser necesariamente un futuro de hombres de ciencia, de hombres de pensamiento, porque precisamente es lo que más estamos sembrando, lo que más estamos sembrando son oportunidades a la inteligencia».
Fidel prestó especial atención al Acuario Nacional, sobre el cual dijo que además de centro recreativo debía ser un sitio para el conocimiento. Foto: Archivo
El audaz concepto fue esbozado en un contexto nacional donde había más de un 20 % de analfabetos, existían muy pocos centros de investigación, empezaba el éxodo de profesionales hacia el exterior, y el número de profesores y maestros distaba mucho de poder respaldar tan ambicioso propósito, para no pocos inalcanzable. A lo anterior se sumaba la creciente política hostil del gobierno de los Estados Unidos.
Bajo su permanente guía surgieron nuevas instituciones científicas, varias de ellas dedicadas al desarrollo de las ciencias naturales, premisa de lo que sería la preocupación constante del Comandante en Jefe por los temas ambientales.
También concedió particular importancia a la formación de capital humano en las más disímiles disciplinas. De no haber dispuesto de tan valioso recurso, el país se habría visto impedido de acometer con capacidad propia todas las investigaciones que posibilitaron concebir el Plan de Estado de Enfrentamiento al Cambio Climático.
Vale resaltar que desde los primeros años de la década de los 60 Fidel fue el más entusiasta promotor del rescate de la naturaleza cubana y del estudio de sus principales recursos, entre ellos el suelo. Potenció, asimismo, los programas de reforestación que propiciaron que la cobertura boscosa de la Mayor de las Antillas creciera de apenas un 14 % en 1959 a un 31,1 % al cierre del 2016.
A partir de las amargas experiencias dejadas por el azote del huracán Flora al oriente cubano, en octubre de 1963, dedicó especial atención a la construcción de obras hidráulicas con la finalidad de evitar la repetición de inundaciones de gran magnitud, como las ocurridas durante aquella contingencia, y asegurar el agua destinada al consumo humano y al desarrollo de la ganadería, la industria y la agricultura, en periodos de marcada sequía.
Según lo expresado por el profesor Luis Enrique Ramos Guadalupe en su libro Fidel Castro ante los desastres naturales, la idea de crear una red pluviométrica capaz de cubrir el archipiélago cubano para conocer con mayor precisión la distribución espacial y temporal de las precipitaciones (dato vital en la concepción de los nuevos planes agrícolas en marcha), y de promover mediante la aplicación de la ciencia y la técnica procedimientos dirigidos a incentivar la ocurrencia provocada de lluvias, cuando de manera natural estas no se producían o eran insuficientes, pone de manifiesto cómo el Jefe de la Revolución se adelanta en identificar al agua entre las más importantes riquezas ambientales, y factor decisivo para la existencia humana y la seguridad económica de la nación.
Con el decursar del tiempo, la preocupación de Fidel por los problemas ambientales del planeta devino tema recurrente en muchos de sus escritos y discursos.
El primero de abril de 1991, al hablar en la inauguración de un frigorífico en Alquízar, señalaba: «Los últimos años se caracterizan por los calores excesivos. En nuestra opinión estos ya son los resultados del efecto invernadero, de los fenómenos de cambios que se van produciendo en la naturaleza como consecuencia del exceso de combustibles fósiles y del dióxido de carbono, que produce un calentamiento».
Y agregaba: «En congresos internacionales los científicos expresan una preocupación creciente por este fenómeno, que a largo o mediano plazo pudiera tener consecuencias peores, como es la disminución de la masa de hielo de los glaciares y en los casquetes polares, las posibilidades de las subidas del nivel de los mares, frecuencia mayor de ciclones alternados con sequías, y sobre todo aumento del calor promedio».
Pero su más trascendental denuncia tuvo lugar el 12 de junio de 1992, al intervenir en la Conferencia de Naciones Unidas sobre Medio Ambiente y Desarrollo, celebrada en Río de Janeiro, Brasil.
Bastó que pronunciara la primera frase para captar de inmediato la atención del auditorio, incluyendo la de sus más enconados adversarios políticos: «Una importante especie biológica está en riesgo de desaparecer por la rápida y progresiva liquidación de sus condiciones naturales de vida: el hombre».
Durante el Coloquio sobre el pensamiento ambiental de Fidel, efectuado en La Habana a principios de julio, en el marco de la XI Convención Internacional sobre Medio Ambiente y Desarrollo, el doctor Ramón Pichs, director del Centro de Estudios de la Economía Mundial, recordaba cómo el Comandante en Jefe fue capaz de exponer con profundidad en poco más de cinco minutos las principales amenazas que se cernían sobre la humanidad y la responsabilidad histórica de las sociedades de consumo en la atroz destrucción del medio ambiente al «envenenar ríos y mares, contaminar el aire y saturar la atmósfera de gases que alteran las condiciones climáticas con efectos catastróficos que ya empezamos a padecer».
En aquel momento, la amenaza del cambio climático estaba bien lejos de ser reconocida a nivel internacional como un proceso inequívoco y acelerado por la actividad del hombre, y apenas se tomaba en cuenta fuera de los círculos académicos.
Su enérgico llamado a que se pagara la deuda ecológica y no la deuda externa, a que desapareciera el hambre y no el hombre, estremeció conciencias y puso la crisis ambiental del planeta en la agenda pública de muchos políticos, partidos, organizaciones no gubernamentales y movimientos sociales de todo el orbe.
Convencido abanderado de armonizar el progreso económico con el estricto cuidado y protección de la naturaleza, salvaguardando la biodiversidad, las playas, bosques, montañas y otros valiosos ecosistemas, Fidel ha sido el artífice de la política ambiental cubana, impulsada por la Revolución a lo largo de casi seis décadas.
Pero lo que más defendió fue la vida y el bienestar del ser humano, a tan noble empeñó entregó sus mayores energías.
No sorprende entonces que en la introducción al Plan de Estado para el Enfrentamiento al Cambio Climático o Tarea Vida se diga que está inspirado en el pensamiento del Comandante en Jefe.
La siguiente cita de un discurso suyo pronunciado ante la Asamblea Nacional del Poder Popular, el 6 de marzo de 2003, corrobora con creces lo expuesto:
«Frente a los cambios de clima, las afectaciones al medio ambiente ocasionadas por otros, las crisis económicas, las epidemias y los ciclones, nuestros recursos materiales, científicos y técnicos son cada vez más abundantes. La protección de nuestros ciudadanos ocupará siempre el primer lugar en nuestros esfuerzos. Nada tendrá prioridad sobre esto».
Pepe Escobar*. – Han saltados todas las alarmas. Hay una especulación desenfrenada sobre “posibles” cabezas nucleares miniaturizadas por Pyongyang.
Cuidado con los perros de la guerra. Los mismas “inteligentes” que mostraron a bebés sacadas de incubadoras por los “malos iraquíes” o que quisieron convencer al mundo con armas de destrucción masiva inexistentes, ahora están vendiendo la idea que Corea del norte ha producido una cabeza nuclear miniaturizada capaz de funcionar en sus misiles.
Este el núcleo del análisis realizado en julio por la Agencia de Inteligencia de Defensa de Estados Unidos. Los “inteligentes” creen que Pyongyang tiene unas 60 armas nucleares. En la inteligencia estadounidense los programas de análisis sobre Corea del norte son prácticamente inexistente. Por lo tanto, estas evaluaciones son simplementes conjeturas al por mayor.
Pero la alarma ha crecido porque ahora estas conjeturas han ido acompañadas con una publicación de 500 páginas del Ministerio de Defensa de Japón. El libro blanco japonés destaca los “avances significativos” de Pyongyang en la carrera nuclear y su “posible capacidad” para desarrollar ojivas nucleares miniaturizadas para sus misiles.
Esta “posible capacidad” es una pura y simple especulación. El informe dice: “Es concebible que el programa de armas nucleares de Corea del norte podría haber avanzado considerablemente y es posible que Corea del norte esté en condiciones de alcanzar la miniaturización de su cabezas nucleares”.
Los grandes medios occidentales alimentaron una auténtica metástasis especulativa. Titularon con frenesí en periódicos y en televisión: “Corea del norte ha miniaturizado sus armas nucleares”. La gran prensa pretende conmover corazones y mentes de occidente con el factor miedo.
Convenientemente el “Libro blanco japonés” también exige condenar a China por “las acciones de Beijing, en los mares del Este y del sur de China”.
Así que echemos un vistazo a las piezas que se mueven de este juego. El Partido de la guerra de Estados Unidos, con sus miles de conexiones en el complejo militar-industrial y en los medios, quiere / necesita una guerra para mantener su maquinaria engrasada. Tokio, por su parte, apreciaría mucho un ataque militar pre-preventivo de Estados Unidos para, a continuación, condenar el inevitable contragolpe de Pyongyang.
Es muy esclarecedor que Tokio estime a China como una “amenaza” tan grave como Corea del norte. El ministro de Defensa Itsunori Onodera fue directo al punto: “Los misiles de Corea del norte representan una amenaza que profundiza el comportamiento amenazante de China en el Mar de China Oriental y el Mar del sur de China, Esto es una gran preocupación en Japón”.
De Pekín respuesta no se hizo esperar.
Kim Jong-Un, que ha sido demonizado hasta el infinito, no es tonto. No va a caer en un ritual de “seppuku” (suicido, harakiri) atacando unilateralmente a Corea del sur, Japón o algún territorio de Estados Unidos. El arsenal nuclear de Pyongyang representa el elemento de disuasión contra el cambio de régimen al estilo de “Saddam Hussein y Gadafi”. Como he argumentado en otras ocasiones, sólo hay una manera de tratar con Corea del norte: diplomacia. Hay que decírselo a Washington y Tokio.
Mientras tanto, la Resolución 2371 del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas tiene como objetivo impedir las principales exportaciones de Corea del norte: carbón, hierro, mariscos. Solo el el carbón representa el 40 por ciento de las exportaciones de Pyongyang, cerca del 10 por ciento de su PIB.
Sin embargo, este nuevo paquete de sanciones no toca las importaciones de petróleo y productos refinados de petróleo desde China. Esa es una de las razones porque Beijing las votó a favor.
La estrategia de Beijing es un intento, muy asiático, para encontrar una solución que le permita “salvar la cara”. Con la resolución 2371 gana tiempo y puede disuadir a la administración Trump, que ir contra Corea puede tener consecuencias terribles.
El canciller chino, Wang Yi, dijo con cautela que las sanciones son una señal de la oposición internacional a los programas de misiles y armas nucleares de Corea del norte. Lo último que necesita Beijing es una guerra en sus fronteras, que podría interferir negativamente en la expansión de las nuevas rutas de la seda.
Beijing siempre está dispuesto trabajar para la reconstrucción de las relaciones entre Pyongyang y Washington. Para China esto es una decisión política “más alta que el Himalaya”. Basta mirar hacia atrás cuando en 1994 se firmó el Acuerdo Marco, durante el primer mandato de Bill Clinton.
El acuerdo tenía como objetivo congelar –e incluso desmantelar– el programa nuclear de Pyongyang, y normalizar las relaciones diplomáticas de Estados Unidos con Corea. Un consorcio liderado por Estados Unidos iba a construir dos reactores nucleares para satisfacer la necesidad de energía de Pyongyang, las sanciones se levantarían y ambas partes se comprometían con “garantías formales” contra el uso de armas nucleares.
Finalmente no pasó nada. El “acuerdo marco” se derrumbó en 2002, cuando Corea del norte fue coronada como parte de “el eje del mal” por Bush, Cheney y los neocon. Los coreanos saben, que la guerra de Estados Unidos contra su territorio nunca ha terminado. al menos formalmente. ¿La razón? El armisticio de 1953 nunca ha sido sustituido por un Tratado de Paz real.
Entonces, ¿qué sigue? Tres recordatorios.
1) Cuidado de las banderas falsas, serían el perfecto pretexto para la guerra contra Pyongyang
2) La narrativa actual es inquietantemente similar al griterío de los “sospechosos de siempre”. Son los mismos que atacaron a Irak o que quieren atacar Irán porque estaría a un paso de “la construcción de un arma nuclear”.
3) Corea del norte tiene billones de dólares en riqueza mineral sin explotar. En las sombras de estas maniobras hay corporaciones perfectamente identificadas que esperan beneficiarse con un jugoso botín después de haber destruido otro país.
__________ *Periodista de Asia Times
Publicado por Asia Times
Traducción: Emilio Pizocaro
LA HABANA (Sputnik) — Representantes de la sociedad civil develaron una fotografía de Fidel Castro (13.08.1926-25.11.2016) en la sede de la Asociación Cubana de la ONU (ACNU) para rendirle tributo en vísperas del aniversario 91 de su natalicio.
«Su vida y obra constituyen un ejemplo para los revolucionarios cubanos y del mundo entero, y develamos una fotografía suya en expresión del compromiso de la sociedad civil cubana con su legado», aseguró Pedro Martínez Pírez, miembro de la junta directiva de la ACNU, ante Alexis Castro, hijo del jefe de la expedición del yate Granma, el vicecanciller Rogelio Sierra y socios individuales y colectivos de la institución.
Tras descubrir junto al viceministro Sierra la imagen captada el 12 de octubre de 1979 cuando Fidel Castro pronunciaba un discurso ante la Asamblea General de la ONU en su condición de presidente del Movimiento de Países No Alineados, Martínez Pírez evocó sus vivencias junto al líder cubano en Nueva York, adonde viajó como periodista de Radio Habana Cuba.
Según el veterano cronista, la pieza oratoria del mandatario cubano ese día es recordada como el discurso más enérgico y ovacionado en la historia de la ONU.
Al intervenir para exponer sus vivencias con Fidel Castro en Nueva York, Raúl Roa Kourí comentó que lo acompañó en 1959 cuando intervino en inglés ante profesores y estudiantes de Harvard.
También en 1960, año en que el autor de ‘La Historia Me Absolverá’ pronunció un discurso de más de cuatro horas, considerado el de más larga duración en la ONU, «sin que nadie de los que colmaban asientos y pasillos se moviera».
Según Roa, aquella alocución fue, por primera vez, un «juicio político al imperialismo norteamericano en el seno de las Naciones Unidas», en el que Fidel insistió en que «Cuba es independiente y soberana».
En 1979, Roa era el representante permanente de Cuba ante la ONU y había trabajado en el Buró de Coordinación del Movimiento de Países No Alineados (MNOAL) que preparó la VI Cumbre, con sede en La Habana.
Recordó el embajador de 81 años, que bajo el liderazgo de Fidel Castro se hizo más clara la esencia del MNOAL en «la lucha antimperialista, anticolonialista, antineocolonialista, antirracista, antisionista y por el desarme total».
El diplomático subrayó que en aquellos momentos solo dos jefes de Estado se refirieron al concepto de que no era posible la paz sin desarrollo: Fidel Castro y el Papa Juan Pablo II, pese a las diferentes posiciones políticas de cada uno.
Significó que coincidían en el problema del cambio climático, en el peligro de la sobrexplotación de los bosques, del agua, de los hidrocarburos.
«No hay duda alguna de que al nosotros rechazar el capitalismo, el imperialismo y abrazar la causa de los pobres de este mundo, como quería José Martí, estamos en una lucha que no ha terminado y no terminará sino con el final del imperialismo en el mundo», señaló el también escritor.
En referencia al legado de Fidel Castro, Roa subrayó que la lucha que él llevó adelante por la defensa de la humanidad, «especie en peligro de extinción» no ha concluido.
Con esta velada, los socios colectivos e individuales de la ACNU se sumaron en representación de la sociedad civil de la isla a las conmoraciones que acontecen en todo el país por el aniversario 91 del natalicio del líder de la Revolución cubana.
El régimen de España anunció que la Guardia Civil se hará cargo de la seguridad en el aeropuerto de El Prat, en Barcelona, si se mantiene la huelga indefinida.
El conflicto en el aeropuerto de El Prat en la ciudad española de Barcelona por la protesta de trabajadores de la empresa Eulen Seguridad cumple más de dos semanas.
El Gobierno español anunció que la presencia de la Guardia Civil se intensificará en la terminal; principalmente en las líneas de control del paso de viajeros y en los escáner.
Según el ministro de Fomento de España, Íñigo de la Serna, se busca garantizar el orden público y la seguridad ciudadana de cara a la jornada de huelga convocada para el lunes, 14 de agosto.
De la Serna aseguró también que el Gobierno, en colaboración con la Generalitat, iniciará el procedimiento para establecer un laudo con un arbitraje obligatorio que ponga fin a la disputa entre la dirección y los trabajadores de Eulen, en el caso de que sea necesario.
La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, culpa al Gobierno de esta situación y rechaza que la Guardia Civil actúe. Mientras tanto, este viernes los pasajeros volvieron a sufrir largas esperas en los controles de seguridad del aeropuerto de El Prat.
El conflicto se inició desde que el pasado 4 de agosto cuando los trabajadores de la empresa privada que gestiona el servicio, convocaron paros parciales. Reclaman el refuerzo del personal y la mejora de las condiciones de trabajo.
Los trabajadores de Eulen han acordado volver a votar el domingo en la asamblea, la propuesta de mediación que presentó este jueves la Generalitat, que pasa por un plus de 200 euros mensuales en 12 pagas al año. Si la plantilla acepta, evitaría la huelga indefinida y de 24 horas que hay convocada para el lunes.
Él se llama Fidel, canción del nicaragüense Carlos Mejías, con letra del Comandante Tomás Borges, es un regalo – cortesía del Frente Sandinista de Liberación Nacional- al cumpleaños 91 del líder histórico de la Revolución Cubana y a todos los hombres de buena voluntad que con su andar cotidiano y sus luchas permanentes, le rinden tributo a su legado eterno. Hoy la compartimos. #YoSoyFidel
Luanda, 11 ago (PL) Angoleños y cubanos destacaron hoy la contribución del líder de la Revolución en la isla, Fidel Castro, en las luchas por la independencia y la preservación de la soberanía de África.
Fidel Castro es una figura universal, hablar sobre su pensamiento es un tema complejo y de gran dimensión, expresó Fernando Jaime, presidente de la Asociación de Amistad Angola-Cuba, durante un panel sobre las facetas del estadista que el próximo domingo cumpliría 91 años.
Derivado de su ejemplo, la isla caribeña fue la única que llevó la cooperación Sur-Sur con las dimensiones de un Estado desarrollado, remarcó en presencia de la embajadora cubana aquí, Gisela García Rivera, el canciller Georges Chikoti y el ministro de Antiguos Combatientes y Veteranos de la Patria Candido van Dunem.
Gracias Fidel, gracias Cuba, sentenció el exestudiante graduado de derecho en aquella nación, ante un público en el que se encontraban diplomáticos latinoamericanos, otros dirigentes angoleños y colaboradores cubanos.
Entretanto, el director del Instituto Medio de Salud Fidel Castro, Manuel Pacavira, aseguró que el revolucionario caló fuerte entre los africanos que estudiaron en el país caribeño.
Alfredo Díaz, director del programa de alfabetización Yo, sí puedo y asesor del Ministro de Educación, dijo que la solidaridad y la cooperación en el sector contó con todo el apoyo del líder de la Revolución.
La participación cubana permitió enseñar a leer y escribir a cuatro millones 399 mil 863 personas en el continente, un millón 843 mil de ellos angoleños.
El coronel Josué Ortega recordó que el pensamiento militar de Fidel Castro fue adquirido autodidácticamente, porque fue un político que empleó la lucha armada para tomar el poder a través de una Revolución.
Sus concepciones de la guerra, explicó, difirieron de lo establecido de aniquilar al enemigo, pues su idea era preservar la vida de los hombres.
Lo que quería, añadió, era cumplir los objetivos con el menor derramamiento de sangre posible.
Mientras que el especialista en asistencia médica Roberto Fernández precisó el interés de Fidel Castro de ofrecer galenos a África para mejorar sus índices sanitarios.
Antes del panel, y como parte de las acciones de homenaje al estadista en su aniversario 91, en el Centro de Prensa Anibal de Melo se proyectaron documentales sobre la obra del líder cubano, fallecido el 25 de noviembre del año pasado.
El ministro de la Defensa instó a fortalecer la Milicia Bolivariana en todos los sectores productivos para enfrentar la injerencia extranjera y defender el proyecto constituyente nacional.
Según el comisario europeo de Economía, el letón Valdis Dombrovskis, los fondos del Banco Central de la Federación Rusa congelados en la Unión Europea, incluyendo los que se hallan en instituciones como Euroclear, «no están embargados y el principio de inmunidad soberana está siendo respetado».
Washington desempolva su vieja Doctrina Monroe con el llamado “Corolario Trump”, buscando reforzar su influencia en América Latina mediante presión militar, amenazas de intervenciones y control de recursos estratégicos.
Serguéi Lavrov afirmó que Rusia y África no consideran necesario lamentar cosas como las sanciones occidentales y, en su lugar, se centran en los mecanismos de cooperación.
El banco cooperativo GLS, con sede en Bochum, Alemania, canceló las cuentas del Partido Comunista Alemán (DKP), con efecto al 31 de diciembre. La formación política atribuyó la medida a sus proyectos de solidaridad con Cuba, informó el medio local Junge Welt.