¿»Cómo recuperar la confianza»?
Por lo menos es muy positivo que hoy te hagas esa pregunta. Ayer en los 80´ la pregunta era otra «¿Cómo recuperamos el miedo?», pero ya sabes, no había el actual flujo de información. Lo importante es que reconozcas que estás pasando por una «crisis». Puedes ponerle el nombre que quieras. ¿»Crisis de confianza»? Perfecto.
Concertación (Hoy «Nueva Mayoría»)
¿Recuerdas tu antiguo nombre? Te llamabas Concertación. ¿Recuerdas cómo llegaste al poder político? Primero un plebiscito y luego una elección. «Chile, la alegría ya viene», «Vamos a decir que NO, oh oh», «Gana la gente… su libertad, ya viene el tiempo… de la verdad, gana la gente… justicia y paz, Chile es futuro… comienza a andar». Sí, que te trae lindos recuerdos ¿verdad? Estuviste en la calle luchando por la vuelta a la Democracia y para decirle adiós a la Dictadura de Pinochet.
Pero… como ves, la alegría nunca llegó. Del terrorismo de Estado se pasó al Terrorismo de Mercado. La alegría había llegado más bien al interés particular. ¿Recuerdas la oleada de privatizaciones en los años 90´? Ja, ya ni te acuerdas. Bueno, nosotros sí que nos acordamos. Tú quizá no te acuerdas porque te has acostumbrado a estar dentro de un lindo trabajo: El Congreso. ¿Y cómo no habrías de estar feliz en un trabajo que prácticamente te paga todo y no tienes que pagar por nada? ¿Qué trabajo te paga teléfono, pasajes en avión, asesorías, «TRASLACIÓN (viático, bencina, arriendo de vehículos, amortización, peajes, alojamiento, alimentación, etc.)»? Y más encima puedes ponerte de acuerdo con tus colegas de la Alianza para subirse la «Dieta Parlamentaria» (tu sueldo). ¿Cómo no podrías estar feliz? ¿Cómo no podrías pelear por esos puestos?
Alianza
¿Recuerdas cómo llegaste al poder político junto a Sebastián Piñera? Llegaste como «Coalición por el Cambio». ¿Recuerdas tu famoso eslogan «La Nueva Forma de Gobernar»? Todavía nos acordamos. «Delincuentes, se les acabó la fiesta». O el niño prodigio de los «botones de pánico» (Joaquín Lavín) cuando declaraba: «Estamos comprometidos con iniciar una verdadera revolución educacional en Chile».
Tuvieron la oportunidad de marcar la diferencia frente a sus adversarios políticos, pero cayeron en «Crisis Institucional», «Crisis de Gobernabilidad»… Al final lo único bueno que recordamos fue el rescate de «los 33», el voto voluntario, el cierre de Penal Cordillera, el «marepoto»… Y para de contar. Su caída en desgracia quizá sirvió para que sus «opositores» se cambiaran hasta de nombre: «Nueva Mayoría».
Nueva Mayoría
Todavía nos acordamos cuando se había pintado a Michelle Bachelet como la «salvadora» de Chile. Tendríamos «Nueva Constitución», «Educación Gratuita», «Gratuidad Universal», «Fin al Binominal», «Fin al Lucro», «AFP Estatal», «Reforma Tributaria», etc… Todo era inmensamente bonito. Ganaron las elecciones presidenciales, y… ahora mírense.
Se destapó el Caso Penta, Caso SQM, Caso Caval…
De la «euforia» inicial con sus caritas nuevas (Arenas, Peñailillo…) se pasó al desembarco de los «dinosaurios» con Jorge Burgos a la cabeza. Tanto es la diferencia que pareciera que quien gobernara actualmente fuera Burgos, y Michelle Bachelet se dedicara más bien a salir a dar discursos o a inaugurar alguna cosa.
…Ahora bien, acérquense un poco. Escuchen muy bien lo que les vamos a decir.
El problema no es de un sector político o de otro, ¿capisci? ¿Leyeron bien la pasada entrevista al Ministro Secretario General de la Presidencia, Nicolás Eyzaguirre? Algunos parece que no la han leído bien, sobre todo el sector de la Alianza que parece que ha leído sólo la parte que le convenía como sector de oposición.
¿Vieron cómo se colgó el ex presidente Sebastián Piñera a la autocrítica de Nicolás Eyzaguirre? «Nunca tan pocos han causado tanto daño a tanta gente en tan poco tiempo». Piñera y sus frases.
Pues bien, Nicolás Eyzaguirre les ha hecho un gran favor. Si no son capaces de ver que todos ustedes se encuentran navegando dentro de un mismo bote y unos a otros se dedican a responsabilizar del mal manejo del bote, entonces lo más probable es que el bote se les termine hundiendo. ¿No creen?
Eyzaguirre reconoce que «la crisis de confianza en la élite es transversal y abarca lo político, lo empresarial, lo eclesial». Reconoce, además, el rol que hoy están cumpliendo las redes sociales, y que hoy no se puede dar el lujo de decir cualquier cosa, y menos dentro de este ambiente.
Te preguntas ¿»Cómo recuperar la confianza»?
Pues hagamos memoria, Alianza…. ¿Te acuerdas de tu colaboración en las privatizaciones de empresas del Estado en la dictadura de Augusto Pinochet? ¿Te acuerdas de la licitación del litio o la Ley de Pesca en el gobierno de Sebastián Piñera?
Hagamos memoria, Nueva Mayoría (Concertación), tú que ibas a traer la alegría… ¿Te acuerdas cuando en el gobierno de Eduardo Frei fuimos testigos del inicio de la privatización del agua; se privatizó la telefonía, se privatizó aún más CODELCO…? ¿Te acuerdas de Eduardo Frei y Miguel Insulza, presidente y canciller respectivamente, cuando hicieron todo lo posible para que Augusto Pinochet, detenido en Londres, no fuera juzgado en el extranjero? ¿Te acuerdas cuando Ricardo Lagos terminó de privatizar el agua y concesionó la principales carreteras del país?
Y te preguntas aún… ¿»Cómo recuperar la confianza»?
El Cobre, la principal materia prima del país, el 70% en manos privadas y lo demás en manos del Estado. Litio, «licitado». Agua, privatizada. Electricidad, privatizada. Mar, privatizado. Carreteras, concesionadas a 15, 30, 40 años, y un sin fin de etc… Y para más remate los Tratados de Libre Comercio (TLC) con EEUU, China… Y ahora último, a escondidas, el TPP (Trans-Pacific Partnership) o Acuerdo Estratégico Trans-Pacífico de Asociación Económica.
Mira la «dieta parlamentaria» que se tiene en el Congreso. Diputados y senadores ganando mensualmente sumas de dinero que un trabajador con su sueldo mínimo apenas lo podría ganar en más de un año.
Y ahora resulta que aparecen los casos PENTA, SQM, Caval, Rossi… El matrimonio entre la política y el dinero, al descubierto. Un secreto a voces al desnudo.
Pongan atención.
El problema no es que los financie tal o cual empresa, o tal o cual empresario, el problema es que son financiados por el gran empresariado, y no por cualquier persona o empresa, como ya quisieran que creyéramos. ¿Acaso no les da vergüenza? Son a esos intereses a los cuales ustedes representan y no al pueblo.
Al gran interés les has hecho la vida fácil y al pueblo, junto a los grandes empresarios, lo sigues estrujando.
¿Hay algún político pagando con cárcel efectiva o lo han despedido del Congreso sabiendo (todo chile) de que se participó en «i-rre-gu-la-ri-da-des»?
Nadie de ustedes parece asumir res-pon-sa-bi-li-da-des. Somos nosotros, al parecer, los que ante cualquier «irregularidad» o «falta», tenemos que pagar con cárcel, multas, despidos, etc. ¿Ley pareja para todos? ¿Igualdad ante la ley? Ustedes, en cambio, están «limpios de polvo y paja». Además de sus «dietas» y extra-dietas, «limpios de polvo y paja». Lindo, ¿verdad?
«Boletas ideológicamente falsas», «fue un error involuntario», «me enteré por la prensa», «fueron asesorías verbales», «todos lo hacen», «cometí una irregularidad, una infracción electoral, pero ningún delito», etc. ¿Cómo quieres «recuperar la confianza»?
Aquí el problema es que tu mayor prioridad no es el pueblo, tu mayor prioridad es satisfacer al gran interés, al gran empresariado, a las grandes élites económicas quienes financian tu actividad política.
¿Más de mil empresas que financian la política chilena, no les dice nada?
Acércate más… Lee aquí: No somos tontos. A los tontos los tienes distraídos y peleando con el tema de los DDHH, aborto tres causales, despenalización del cultivo de la marihuana, la relación FARC-PC-Mapuche, los correos del cardenal, y de cuando en cuando, con el tema de La Haya y Bolivia, para que creamos que están peleando por nuestros intereses y bla, bla, blá.
…A todo esto ¿Se acuerdan cuando la Alianza se preguntaba de dónde iba a sacar el dinero la Nueva Mayoría para cumplir con el «programa» y sus «reformas»? Hoy está calladita. ¿Por qué será?
Es de esperar, no encontrarnos con más sorpresitas en el camino. No queremos que el día de mañana nos tengas que decir que el Estado tiene deudas enormes con el FMI u otro organismo. Sabes bien que quienes pagan siempre ha sido el pueblo y no los verdaderos responsables. No querrás terminar partiendo en un helicóptero, ¿verdad?
Es cosa de cambiar las prioridades, tan sencillo como eso. ¿O esperas a que aparezca alguien de la nada y quiera cambiar verdaderamente las prioridades por ti?
Bueno, que tengan un buen día.
FIRMA: El Pueblo Consciente
