«El niño sirio estaba bien vestido; bien alimentado. Murió porque sus padres fueron codiciosos con la buena vida en Europa. La cola está disparando los costes», Peter Bucklitsch, del partido UKIP.


«El niño sirio estaba bien vestido; bien alimentado. Murió porque sus padres fueron codiciosos con la buena vida en Europa. La cola está disparando los costes», Peter Bucklitsch, del partido UKIP.


«En marzo de 1979 se dio la llamada «unificación de las tendencias». Un acto que se llevó de forma mecánica pues no hubo ningún pleno o congreso que debatiera las diferencias ideológico-prácticas que cada tendencia tenía sobre la revolución, las etapas y las fuerzas motrices de ellas, o las alianzas que debían contraerse con otras clases y organizaciones, y si en cada caso eran temporales o no. Esto estaba dentro de lo normal del desarrollo del Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN): y es que si cuando el FSLN apareció en escena no hubo una clarificación ideológica y organizativa previa, entonces por qué habría de haberla después; y aunque es factible pensar que en el desarrollo de la lucha, muchos de los autodenominados «marxista-leninistas» se tenían que dar cuenta de que era necesario barrer las concepciones ideológicas militares y organizativas antimarxistas, se demostró que para 1979 los autodenominados marxista-leninistas que militaban en el FSLN no eran tales, por lo que tampoco se dio tal cosa. Dicho de otro modo: en los 80, y con la sumisión consumada de los líderes del FSLN (GPP) y del FSLN (Proletaria) a la línea y dominio de la tendencia del FSLN (Tercerista) dominada por los hermanos Ortega, dentro del FSLN se intentó disminuir, disimular, ocultar, las no tan pasadas diferencias así como el fraccionalismo existente, fruto de ellos se pasó a considerar públicamente a las tendencias de los 70 como algo «pasajero», «banal», e incluso los más desvergonzados y patéticos decían que no había habido fraccionalismo sino que realmente todos respondían a los mismos lineamientos y que cada tendencia cumplía un «trabajo específico».
La unificación por tanto fue una unificación mecánica como ya expresamos, y los líderes de las tendencias escogieron eslóganes formalistas como: «¡Por la unidad sandinista!» «¡Contra el somocismo, unidad sandinista!», etc. Pero incluso los que argumentaron a posteriori que no había diferencias ideológicas, reconocieron tiempo después que estas sí estaban presentes, y reconocieron también algo si cabe más importante: confesaron que la posibilidad de que existieran estas tres tendencias fue debido a que el FSLN desde su nacimiento permitió el fraccionalismo y el arribismo, y no existía un ejercicio de crítica y autocrítica bajo la base de una misma línea de unidad ideológica y organizativa:
«Debido a la represión, debido a que nos manteníamos mucho tiempo sin vernos, al faltar una línea común, un compromiso político materializado en un estatuto, cada quien organizaba de hecho su trabajo a su manera. Y empezaban los choques. La división no nace de una profunda discusión ideológica y política, aunque de hecho existían este tipo de problemas. Si hubiera existido un marco de organización menos artesanal quizás hubiésemos podido resolver las contradicciones, que son propias al desarrollo de todo movimiento, de manera positiva, atendiendo a la crítica, unidad y crítica. La no existencia de este marco de discusión adecuado sumado a nuestra inmadurez como hombre, como revolucionarios, y a la situación represiva llevó a que nos fuéramos separando, fraccionando en la práctica en las tres tendencias que se conocen». (Marta Harnecker; Entrevista a Humberto Ortega, 1993)
En adelante iremos viendo como los líderes del FSLN (GPP) y del FSLN (Proletaria) se adaptarían a la tendencia del FSLN (Tercerista), demostrando con ello que ninguna de las tres tendencias era una tendencia marxista-leninista. La prueba firme está en el programa elaborado tras la reunificación y tras la toma de poder». (Equipo de Bitácora (M-L); ¿Qué fue de la «Revolución Popular Sandinista»?: Un análisis de la historia del FSLN y sus procesos, 19 de julio del 2015)
A cambio, los profesionales viven momentos de incertidumbre y las quejas de los pacientes por los servicios no sanitarios -la calidad de la comida, el tratamiento de la basura, la desratización, el aparcamiento de pago…- inundan los buzones y las redes sociales. Esta situación provocó un intenso clamor ayer por la tarde en Vigo y más de cien mil personas -la organización dijo 200.000 y el Concello lo dio por bueno- se echaron a la calle en contra del modelo elegido para construir el nuevo hospital, bautizado Álvaro Cunqueiro. La cabecera de la manifestación había llegado ya a la Porta do Sol y todavía quedaba gente sin salir del Hospital Xeral. Es una de las mayores marchas de la historia de Vigo.
El modelo público-privado garantiza que la sociedad que lo ha construido gestionará los servicios no clínicos del hospital durante veinte años, por lo que cobrará un canon anual de 68 millones de euros.
El hospital es la gran apuesta política del gobierno de Feijoo para el área de Vigo, donde ha sufrido sus mayores castigos electorales. A las críticas por el modelo elegido y las deficiencias de los primeros días se suma el caso del Aspergillus. Una señora de 65 años con una patología hepática grave falleció en la uci, con análisis positivos de ese hongo. Los jefes de los servicios médicos y quirúrgicos del hospital descartaron en un comunicado que falleciese por Aspergillus, sino «por la evolución natural de su enfermedad». También aseguraron que «las circunstancias clínicas de base y el tiempo de ingreso en el Hospital Álvaro Cunqueiro permiten descartar la sospecha de que la infección fuese adquirida en ese hospital». El Aspergillus no estuvo en las consignas, pero sí en las conversaciones y alentó a muchos a salir a la calle.
La manifestación de ayer estuvo promovida en origen por el alcalde y organizada por la junta de personal. Abel Caballero pidió ayer a Feijoo que tome cartas en el asunto y rectifique. «Todo Vigo está aquí», aseveró, «contra este agravio». Todos los sindicatos y partidos de la oposición respaldaron las protesta. Pero también por muchos profesionales de los que están trabajando ya en el Álvaro Cunqueiro, algunos con filiación política y otros sin ella. También algún jefe de servicio. La marcha recorrió Vigo a gritos de «¡Feijoo, dimisión!» y «¡Conselleira, dimisión!». Participaron alcaldes de toda el área y se fletaron en torno a un centenar de autobuses para llenar Vigo.
El BNG cargó contra el «despropósito» de la situación que atraviesa el nuevo hospital de Vigo y que supone que el PP quiere convertir «a saúde en negocio». Por ello, los nacionalistas reclamaron la dimisión de Rocío Mosquera y una comparecencia urgente de Feijoo en el Parlamento para dar explicaciones. Lo hacen, según Xavier Vence, «porque hai responsabilidades por esta nefasta xestión e por este despropósito no que están convertendo a inauguración do hospital semiprivado de Vigo». Vence llamó a frenar la privatización.
>lavozdegalicia.es
Amnistía Internacional, como Human Rights Watch, utilizan la excusa de los derechos humanos con otros fines, fines políticos y económicos. Estas organizaciones, que actúan en beneficio del poder económico occidental, tienen una importancia capital en la estrategia de conquista del mundo por parte de las corporaciones, ya que justifican con supuestas buenas intenciones y supuestas justas motivaciones lo que no son otra cosa que los intereses económicos de las grandes fortunas, amparando los ataques militares, económicos o sociales que el poder occidental desarrolla contra un país o gobierno determinado. Se ceban especialmente con los rivales o enemigos de este poder y para ello no dudan en falsificar los hechos, en inventarse historias y en tener una doble vara de medir llamativa para situaciones similares.
El habitante occidental, demasiado desinformado, apenas percibe esta actuación y no porque no sea evidente, sino porque carece de un mínimo de información y de conocimientos para darse cuenta que está siendo claramente engañado.Amnistía Internacional está financiada por las corporaciones y hace esta función.
La financiación de Amnistía no es mostrada de forma clara, tiene estructuras de cobertura para tratar de ocultarlo. Hay que ir a una organización como Amnesty International Limited para ver cómo recibe dinero de las corporaciones (ej. Open Society del criminal financiero Soros) o de gobiernos, como el británico, o de la propia Comisión Europea. Esta, la Comisión Europea, forma parte de la Troika (junto al Banco Central Europeo y el FMI), que están destruyendo con las corporaciones la democracia y el nivel de vida en Europa, y curiosamente financian a Amnistía, lo que nos dice muchas cosas.
Se puede ver quienes la financian en este archivo del enlace en la página 8/45:
Amnesty funding
«The Directors are pleased to acknowledge the support of the John D. and Catherine T. MacArthur Foundation, the Oak Foundation, Open Society Georgia Foundation, the Vanguard Charitable Endowment Programme, Mauro Tunes and American Jewish World Service. The UK Department for International Development (Governance and Transparency Fund) continued to fund a four year human rights education project in Africa. The European Commission (EuropeAid) generously awarded a multi-year grant towards Amnesty International’s human rights education work in Europe.»
miguel-esposiblelapaz.blogspot.com.es
La Unión Europea (UE) está pasando por el mayor obstáculo desde que fue creada. Y es que a la progresiva desinstalación calculada del Estado de Bienestar se le está sumando ahora con gran ahínco la crisis migratoria que, al contrario, no la supieron calcular.
Claramente los beneficiados podrían resultar los eurorealistas, ya que la presente crisis en buena parte se debe al papel cómplice y sumiso que ha tenido la UE ante los intereses geopolíticos de Estados Unidos.
Hoy los europeos deberán preguntarse del por qué de la crisis, y los más apropiados para contestar dicha pregunta podrían ser los eurorealistas.
El discurso eurorealista podría tomar un nuevo impulso dirigido a su principal objetivo: terminar con la Unión Europea, que más que un instrumento para el pueblo europeo se ha convertido en un real instrumento de los intereses de EEUU, al igual que la estructura de la OTAN.
La crisis migratoria debiera ser la oportunidad para que el matrimonio UE-EEUU pueda llegar a su fin; sería inoportuno ignorar que todo esto ha sido consecuencia de una UE sujeta a los intereses de EEUU. Es cosa de repasar la actitud sumisa y colaboradora que ha tenido últimamente la UE frente a EEUU respecto al asunto Ucrania, al tema de las sanciones a Rusia, el TTIP, pero principalmente el papel jugado en la desestabilización en Medio Oriente y el Magreb.
Dicha actitud está derivando a un «tiro por la culata», porque quienes pagan las crisis por lo habitual son los pueblos, y en este caso será el pueblo europeo quien pagará; visibilizando, además, las diferencias entre la Europa del oeste y la Europa del este, por la simple razón de que los países ricos (Europa del oeste) son los que principalmente han dirigido las políticas erradas de la Unión Europea, siendo Alemania la principal responsable.
Los responsables de Europa deberían hacerse cargo de la crisis migratoria y hacer su propio mea culpa, tanto sus dirigentes como los que aplaudieron de buena gana en su momento, por ejemplo, las intervenciones militares en Libia o los que guardaron silencio.
El continente europeo debería hacer memoria y recordar el drama de la migración o los refugiados en la Segunda Guerra Mundial. No hay mucho que analizar para comprender la actual crisis.
Si se colaboró junto con EEUU y la OTAN en la desestabilización de Medio Oriente y el Magreb, lo mínimo que deberían hacer es hacerse responsables y resolver la actual crisis.
Y es de esperar, por lo demás, que no se les ocurra resolver la crisis señalando que el problema le corresponde «a todos» y quieran mandar ciertas «cuotas» a países que no han tenido nada que ver con las decisiones tomadas por grandes potencias. Por ejemplo, mandar ciertas «cuotas» a América Latina. No, el problema lo deben resolver los que provocaron la actual crisis, y, que sepamos, Europa no está en guerra y goza de recursos suficientes para hacerse cargo.
«El renacimiento del trotskismo y sus causas
Después del XXº Congreso del PCUS de 1956, y especialmente después del XXIIº Congreso del PCUS de 1961, donde el renegado de Jruschov lanzó la salvaje campaña antistalinista, el trotskismo que había recibido duros golpes y había perdido toda influencia en las masas levantó la cabeza, reanudó su actividad a gran escala, y extendió sus venenosas raíces a muchas áreas y países del mundo. Como hongos después de una lluvia, los grupos y organizaciones trotskistas comenzaron a surgir en gran número en Europa, América y otras áreas.
En la actualidad, desde los años 60 en adelante, los trotskistas han agrupado en torno a cuatro centros principales: el «Secretariado Internacional», la denominada «Corriente Marxista Internacional», la «Secretaría de Latinoamérica», y el «Comité Internacional», en Londres, que reúne principalmente a los grupos trotskistas estadounidenses y canadienses británicos.
Los grupos trotskistas en Europa Occidental son especialmente numerosos. Así, por ejemplo, varios de estos grupos han aparecido en Francia y llevan a cabo su perniciosa actividad: el Partido Comunista Internacionalista (PCI), que es la rama francesa de la IV Internacional; la Organización Comunista Internacionalista (OCI), una facción rival que no pertenece a la IV Internacional; la Alianza de Jóvenes por el Socialismo (AJS), la Alianza Revolucionaria Marxista (ARM); la Liga de los Comunistas (LC), el grupo Lucha Obrera (LO), etc. En España, también, varias organizaciones trotskistas están activas: el Partido Obrero de Unificación Marxista (POUM), la organización Acción Comunista (AC), el Partido Revolucionario de los Trabajadores (PRT). En Gran Bretaña la organización trotskista conocida como la Liga Socialista del Trabajo (LST) sigue activa. Varias agrupaciones trotskistas también han levantado la cabeza en muchos otros países como Alemania Occidental, Suecia, Bélgica, etc., y otros por toda Europa, y también en otros países como Ceilán y Japón en Asia.
¿Cuáles son las causas de la reactivación del trotskismo en la actualidad?
Las principales causas son las siguientes:
Por una parte la resurrección del trotskismo está conectada a la involucración, en el movimiento actual del día de hoy, de estratos «intermedios», de la pequeña burguesía urbana, como los pequeños comerciantes, trabajadores no manuales, intelectuales, estudiantes, etc. quienes traen consigo en el movimiento la vacilación típica de la pequeña burguesía. Precisamente estas vacilaciones, esta inestabilidad pequeño burguesa, tiene inclinaciones que van de un extremo a otro, desde el anarquismo y el aventurismo, a un desenfrenado oportunismo de extrema derecha y el derrotismo, lo que constituye un terreno favorable para que el trotskismo florezca y especule con sus propios fines contrarrevolucionarios.
Finalmente, en el período actual, cuando la ola del movimiento revolucionario está en constante aumento, la burguesía instiga y apoya por todos los medios y caminos la extensión del trotskismo, aprovechandose de los sentimientos de protesta de las grandes masas trabajadoras y en particular de las masas de la juventud y los estudiantes contra el orden capitalista y de sus sinceras pero espontáneas inclinaciones revolucionarias, busca desorientarlos bajo fraseología ultrarevolucionaria, para desviarlos del verdadero camino de la revolución, para despistarlos en aventuras que no son perjudiciales para la burguesía, y les llevará a la desilusión. Esta es la razón por la que las editoriales financiadas por la burguesía, hoy distribuyen los trabajos trotskistas y la literatura trotskista ocupa grandes espacios». (Agim Popa; El movimiento revolucionario actual y el trotskismo, 1972)