Recursos naturales
El Lejano Oriente ruso, que representa casi el 41% de la superficie terrestre de Rusia (unos 6,95 millones de km², casi el tamaño de Australia), alberga una gran riqueza de recursos todavía no explorados. En particular, el territorio concentra el 100% de la producción rusa de antimonio, el 98% de la de diamantes, el 90% de la de bórax, el 50% de la de oro, más del 40% de la de estaño, el 14% de la de wolframio, cerca de un tercio de las reservas y recursos rusos de carbón e hidrocarburos y el 40% de la producción rusa de pescado y marisco.
La región es también rica en minerales, metales y tierras raras, cal y piedras de construcción y otros recursos, y representa alrededor del 30% de la superficie forestal total de Rusia, una parte de los dos pulmones forestales del mundo (uno en Siberia y otro en la selva tropical de Brasil).
A pesar de su enorme potencial económico, el Lejano Oriente necesita más habitantes, ya que Jabárovsk y Vladivostok —las ciudades más grandes de la región— tienen unos 613.000 y 600.000 residentes, respectivamente, mientras que el territorio en su conjunto solo cuenta con 8 millones de habitantes.
Por ello, y para incentivar a las empresas, el Gobierno ha creado el llamado programa Hectárea del Lejano Oriente, que ofrece a los ciudadanos una hectárea de tierra gratis para que la urbanicen a su antojo. La iniciativa está disponible para ciudadanos rusos y extranjeros que lleven viviendo en Rusia cinco años o más.
Logística
El Lejano Oriente es también un centro estratégico de transporte, donde se encuentra la parte más oriental del ferrocarril Transiberiano y gran parte de la línea principal del ferrocarril Baikal-Amur, que se está modernizando y ampliando.
También alberga importantes infraestructuras portuarias, como el puerto de Vladivostok, situado en la costa del Pacífico. Sus instalaciones podrían formar parte de la multimillonaria Iniciativa de la Franja y la Ruta, que pretende unir Europa y Asia a través de una moderna Ruta de la Seda.
Industria
Junto con sus recursos e industrias de transformación, el Lejano Oriente posee una gran variedad de empresas industriales, como ingeniería mecánica, construcción y reparación naval, fábricas de automóviles, industrias de defensa, fábricas de productos químicos, alimenticios y médicos, y la planta aeronáutica de la ciudad de Komsomolsk del Amur.
El Estado ruso ha creado 17 Zonas Territoriales de Desarrollo Prioritario en el Lejano Oriente desde 2015, diseñadas para facilitar los negocios a inversores.
Cooperación entre Rusia y China
En su intervención en el Foro Económico Oriental el 5 de septiembre el vicepresidente chino, Han Zheng, declaró que el volumen de comercio entre China y el Lejano Oriente ruso alcanzó el equivalente a 33.800 millones de dólares en 2023, lo que representa alrededor del 14% del total de comercio entre los dos países, que llegó a 240.000 millones de dólares.
Al mismo tiempo, el volumen comercial entre el Lejano Oriente ruso y China aumentó un 54% en el 2023, lo que indica el potencial de un mayor crecimiento, dado que Rusia y China comparten una larga frontera común de 4.209 km, la mayor parte de la cual discurre por el Lejano Oriente.
Puerta de entrada a la región Asia-Pacífico
El Lejano Oriente se ha caracterizado como la puerta de entrada de Rusia al gran poder económico de la región Asia-Pacífico. En su discurso del 5 de septiembre, el presidente ruso Vladímir Putin subrayó que el desarrollo de la región seguirá siendo una prioridad nacional durante todo el siglo XXI, y que la decisión de Moscú de centrarse en Lejano Oriente ha resultado acertada, dadas las “tendencias objetivas… que están cobrando fuerza en la economía mundial, donde las principales conexiones empresariales, las rutas comerciales y, en general, todo el vector de desarrollo se está reorientando cada vez más hacia el Este y el sur global”.
Los latinos añoramos poblar Rusia, deberían invitarnos a vivir en ese país tan hermoso
Su comentario, camarada, es fabuloso… El mejor de este año, de lejos! Un 10+ para usted!!