“La provocación de las fuerzas de la coalición liderada por Estados Unidos contribuye a la expansión de las organizaciones terroristas en Siria”, dijo el viernes Serguei Shoigu.
El alto cargo ruso hacía alusión particularmente al derribo de un avión militar del Ejército sirio en la provincia de Al-Raqa (norte) por parte de la denominada coalición anti-Daesh, ataque que Damasco ha prometido responder arremetiendo contra los grupos de la oposición armada, apoyados por EE.UU.
En este contexto, informó de que en reacción al mencionado acto de EE.UU. contra el Ejército sirio, el Ministerio de Defensa ruso ha suspendido sus contactos con el Departamento de Defensa estadounidense (Pentágono) respecto al memorando de prevención de incidentes aéreos en Siria.
La Cartera rusa aseguró haber tomado dicha decisión debido a que las fuerzas estadounidenses no habían consultado con Rusia antes de derribar el Sujoi Su-22 del Ejército de Siria que volaba en las zonas norteñas del territorio de Siria.
A principios de esta semana, el vicecanciller ruso, Serguei Ryabkov, tachó el derribo del avión sirio de una agresión estadounidense y de un acto de “apoyo al terrorismo”.
Las autoridades sirias han subrayado en reiteradas ocasiones la intención de Washington para una nueva agresión a Siria, bajo diferentes pretextos. La más reciente, las afirmaciones de la Casa Blanca sobre un supuesto plan del Gobierno de Bashar al-Asad para llevar a cabo un presunto ataque con armas químicas.
Es de mencionar que Rusia ya ha reaccionado a las afirmaciones de la Casa Blanca tachando de “inadmisible” cualquier amenaza de Washington contra el “liderazgo legítimo” de Siria sin una investigación de por medio.
