El portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Irán, Bahram Qasemi, indicó el viernes que emplear cualquier “política de apaciguamiento” o “usar como herramientas” a los terroristas para lograr diferentes objetivos provocará una nueva ola de terrorismo en el mundo.
Qasemi hizo estas declaraciones tras un ataque terrorista lanzado contra un puesto de control en la península egipcia del Sinaí y advirtió de que “los perdedores del grupo terrorista EIIL” (Daesh, en árabe) podrían dar inicio a nueva fase de atentados en diferentes partes del mundo.
“La dispersión y la huida de los terroristas a raíz de las derrotas que han sufrido en Irak y Siria supone una amenaza seria para toda la región y el mundo entero”, subrayó.
Qasemi, además, expresó las condolencias de Teherán a las familias de las víctimas del citado asalto sangriento, que cobró la vida de al menos 26 soldados egipcios y dejó muchos heridos. Los extremistas takfiríes de Daesh reivindicaron inmediatamente el ataque.
Daesh emitió la noche del viernes un comunicado en el que afirmó haber realizado la misma jornada, un ataque contra los soldados egipcios que se preparaban para atacar las posiciones de los terroristas en el Sinaí, cerca de la frontera con los territorios ocupados palestinos.
El atacante suicida de Daesh chocó el coche bomba que conducía contra el puesto de control en la aldea de Al-Barth e inmediatamente, decenas de hombre enmascarados bajaron de 24 Land Cruisers y abrieron fuego por una media hora contra unos 60 militares que se encontraban en el lugar, según fuentes locales de seguridad, citados por los medios.
Los soldados respondieron con fuego y mataron a unos terroristas. El resto logró huir de la zona, agregan las fuentes.
Un segundo coche bomba, según la banda, fue utilizado para frenar un convoy militar que había sido enviado para reforzar a los militares desplegados en el puesto de control.
Pese a los ataques de la aviación contra posiciones de Daesh en este país norteafricano, los terroristas siguen protagonizando escenas violentas. El pasado 18 de abril, los takfiríes de la banda ultraviolenta atacaron un puesto de control en el sur del Sinaí y mataron a un policía e hirieron a otros tres.
