Un agente de Policía de la ciudad de Pass Christian (Misisipi, EE.UU.) aturdió en repetidas ocasiones con una pistola de electrochoques (taser, en inglés) a una mujer embarazada, luego de que esta lo agrediera después de que el auto en que se movilizaba fuera detenido por exceso de velocidad.
De acuerdo con el diario ‘Miami Herald’, Aviana White, de 27 años, iba en el coche con su hermano, Miles Spears, cuando el agente, Kandice Clayton, se acercó y pidió a este último –quien conducía– que mostrara su licencia de conducir. El joven no tenía y ninguno quiso identificarse.
El jefe de Policía de la ciudad, Tim Hendricks, afirma que ambos jóvenes se disgustaron tras la petición y salieron del vehículo sin dar aviso. Inmediatamente, se les pidió regresar a sus asientos, pero ellos se rehusaron. Por tal motivo, el uniformado procedió a arrestarlos alegando mala conducta.
Spears, de 21 años, no se resistió al arresto. Sin embargo, White se negó a ser detenida, se alejó y golpeó a otro policía que se encontraba en el lugar. Fue entonces cuando Clayton decidió usar su arma eléctrica.
¿Fuerza policial injustificada?
Según Alicia Burton, una testigo de la escena, la víctima salió del coche y se retiró algunos metros para llamar a quejarse del trato que estaba recibiendo, cuando el uniformado corrió hacia ella y la atacó. «No me electrocute, estoy embarazada», suplicaba la joven, según relata.
Burton, quien captó en video parte de los hechos, dijo que el oficial impactó a la víctima en el abdomen y en una pierna.
Desde el departamento de Policía señalan que tienen en su poder videos del incidente que fueron revisados para clarificar la situación. Hendricks subraya que White fue «muy desafiante con el oficial» y añadió que «los cargos están justificados».
