El Ministerio de Defensa de Rusia anuncia que EE.UU. está reforzando sus sistemas de defensa antimisiles para tener la posibilidad de utilizar armas nucleares.
El portavoz del Ministerio de Defensa de Rusia, Alexander Yemelyanov, ha asegurado este jueves que “el Pentágono ha empezado a construir complejos” con los que EE.UU. podría realizar “un ataque global instantáneo” y ha estimado que “los planes de despliegue de armamentos estadounidenses amenazan el potencial de disuasión de Rusia”
Según el portavoz ruso, el sistema global de defensa antimisiles de EE.UU., “reduce el umbral para el uso de las armas nucleares y crea una ilusión de impunidad para el empleo inesperado de armamento estratégico”.
En concreto, Yemelyanov ha manifestado que Washington “quiere engañar a la comunidad internacional sobre las posibilidades reales de sus sistemas de defensa antimisiles”.
“El despliegue del sistema de defensa global antimisiles” por parte de EE.UU. “destruye de manera sistemática el actual sistema de seguridad internacional”, ha lamentado el vocero ruso y ha añadido que el sistema de defensa antimisiles de EE.UU. es un incentivo para el desarrollo de capacidades de misiles en todo el mundo y provoca una nueva carrera armamentística.
Yemelyanov ha anunciado que en la actualidad, Estados Unidos posee 60 misiles antibalísticos en Europa y otros 150 en la región Asia-Pacífico. “Para 2022, EE.UU. tendrá más de 1000 misiles antibalísticos y, en el futuro, superará el número de ojivas de misiles intercontinentales de Rusia”, ha detallado.
También, ha advertido de que Washington podría lanzar misiles de crucero desde sus bases militares en Rumanía y Polonia y, de ese modo, amenazar todo el territorio europeo de Rusia.
El aumento de la presencia militar de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) cerca de las fronteras de Rusia se realiza con el argumento de la ‘amenaza rusa’ que dicen percibir algunos Estados occidentales. El aumento de tensiones se produjo, sobre todo a partir de la anexión de Crimea y de la crisis de Ucrania.
Rusia ha expresado reiteradamente su preocupación por la acumulación, por parte de la OTAN, de equipamiento militar a lo largo de sus fronteras occidentales, advirtiendo de que la expansión de la Alianza Atlántica socava la seguridad de la región y el mundo.
