China rechaza las acusaciones “injustificadas” en su contra del presidente de EE.UU., de supuestamente intentar manipular las legislativas estadounidenses.
“China ha seguido todo el tiempo el principio de no interferir en los asuntos internos de otros países. Es una tradición de la política exterior china”, ha señalado este miércoles el ministro chino de Exteriores, Wang Yi, durante su intervención en el 73.º periodo de sesiones de la Asamblea General de Naciones Unidas (AGNU).
Pekín no ha interferido ni “interferirá en los asuntos internos de ningún país. Nos negamos a aceptar acusaciones injustificadas en contra de China”, ha agregado el canciller chino.
Wang ha respondido así a las imputaciones lanzadas por el presidente de EE.UU., Donald Trump, quien en su discurso como presidente de la AGNU acusó a Pekín de intentar influir en las legislativas estadounidenses del próximo 6 de noviembre.
“Por desgracia, hemos determinado que China ha estado tratando de interferir en las próximas elecciones de 2018, que se celebrarán en noviembre, en contra de mi Administración”, declaró Trump sin ofrecer evidencias al respecto.
“(Los chinos) no quieren que yo (…) gane porque soy el primer presidente que ha desafiado a China en el comercio”, sostuvo Trump.
Las acusaciones de Trump se producen en medio de tensiones crecientes entre Washington y Pekín por la guerra comercial lanzada por la Casa Blanca bajo diversos pretextos, como el robo por empresas chinas de tecnología de propiedad intelectual de firmas estadounidenses.
Washington comenzó el pasado 6 de julio a imponer aranceles del 25 % a la importación de bienes de China por valor de 34 000 millones de dólares, y luego en agosto aplicó una segunda ronda de aranceles a productos procedentes de China por valor de 16 000 millones de dólares.
En el último capítulo de este desencuentro entre ambas naciones, Estados Unidos comenzó a aplicar el lunes aranceles del 10 % a bienes chinos importados por valor de 200 000 millones. En respuesta, Pekín impuso aranceles de entre el 5 y el 10 % a 4000 bienes estadounidenses por valor de 60 000 millones de dólares.
Ante las medidas restrictivas de Washington, el Ministerio de Comercio de China presentó el pasado 18 de septiembre una queja ante la Organización Mundial del Comercio (OMC) por considerar que estas tarifas son contraproducentes para el comercio internacional.