El gobierno de Venezuela fijó postura tras las declaraciones injerencistas del autodenominado Grupo de Lima, conformado por gobiernos neoliberales de la región. El canciller venezolano, Jorge Arreaza, ha calificado este documento como «insólito y extravagante» en el que los países firmantes instan al presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, a no asumir la presidencia de Venezuela porque ellos no reconocen las elecciones en las que resultó victorioso, y piden que transfiera el poder a la Asamblea Nacional. teleSUR
