El director de la entidad de rescate iraní, Mahmud Reza Peyrawi, en un artículo publicado por la revista Prehospital and Disaster Medicine, de la Universidad de Cambridge (Reino Unido), critica las consecuencias que tuvieron las sanciones y las acciones inhumanas de EE.UU. sobre las personas afectadas por las inundaciones en Irán en 2019, según ha informado este domingo el portal web de la Sociedad de la Media Luna Roja de Irán.
“Desde la Primera Guerra Mundial, las sanciones contra los gobiernos y las organizaciones internacionales se han convertido en una política común entre muchos gobiernos. (…) Desafortunadamente, algunos Estados hostiles, violando los derechos humanos, recurren a la aplicación de sanciones injustas, incluso en casos de desastres naturales y cuando se necesitan acciones humanitarias; el último ejemplo de ello fueron las crueles sanciones de EE.UU. contra las operaciones de ayuda durante las terribles inundaciones de Irán en 2019”, se lee en el artículo.
Peyrawi denuncia que la entidad que dirige es una organización internacional sin ánimo de lucro, que ofrece ayuda en caso de desastres, pero, subraya, ha sufrido mucho por las sanciones unilaterales de EE.UU. contra Irán, ya que impiden la llegada de ayuda internacional en tiempos de desastres.
Al respecto, deja en claro que, en conformidad con las normas y resoluciones de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), existen cinco prioridades que no deberían estar sujetas a las sanciones, a saber: la salud, el alojamiento, la alimentación, el agua potable y la educación. Sin embargo, prosigue el funcionario iraní, las autoridades estadounidenses, al influir en otros países del mundo, impidieron que sus ayudas monetarias y no monetarias llegasen.
Tras enfatizar que las sanciones injustas de EE.UU. violan claramente los derechos humanos, Peyrawi recalca que Irán espera que la comunidad internacional presione para cambiar el comportamiento del país norteamericano a fin de impedir la vulneración de los derechos humanos en tiempos de desastres y garantizar la dignidad de las personas afectadas.
Las sanciones estadounidenses dificultan incluso las importaciones iraníes de medicamentos, equipos médicos y alimentos.
A pesar de tales vicisitudes y en medio del brote del nuevo coronavirus, denominado COVID-19, en el país persa, el Gobierno iraní está haciendo todo lo posible para contener la propagación de la enfermedad y ocupa el segundo lugar en cuanto al tratamiento de los contagiados, según las cifras proporcionadas por el portal de estadísticas mundiales Worldometer.
